El vikingo salvaje, de Sandra Hill

Hace unos días os contaba que había leído la novela de Sandra Hill “El último vikingo” y que no sabía si leer la siguiente, “El vikingo Salvaje“. Pero si, la he leído. Dado que la primera no me convenció, me di de margen un par de capítulos para decidir si leerla o no y la he terminado en dos ratos, como quien dice. Es mucho más entretenida, para mi gusto, y hasta más divertida.

Países Nórdicos, 998 d. C. Jorund Ericsson es un hombre de guerra que al regreso de la misma descubre que durante su ausencia una gran hambruna ha provocado la muerte de su mujer y sus dos pequeñas hijas gemelas. Jorund se casó por obligación y no sentía especial apego por la mujer con la que tuvo que hacerlo, pero quería con locura a sus hijas y el dolor de saber que han muerto unido a la culpa por no haber estado allí cuando ocurrió, le sumen en la tristeza. Cuando su padre le pide que busque a su hermano Rolf, desaparecido un año antes, no duda en embarcarse para encontrarle, pues sabe bien lo que es el dolor de un padre al perder a un hijo. Lo que no puede imaginar es que una orca con la que es capaz de comunicarse, le arrastre lejos de todo lo que conoce y le haga viajar en el tiempo y en el espacio hacia un lugar desconocido.

Jorund llega a Galveston, Texas, y al año 2000. ¿Pero qué hace allí? Él mismo no lo sabe, ni siquiera cuando toma conciencia de dónde y, sobre todo, de cuándo está. Claro que tampoco las personas con las que se encuentra pueden creer que sea un vikingo del s. X, así que es internado en un centro de salud mental. Allí trabaja la doctora Maggie McBride, una psicóloga que estaba presente, junto a sus dos hijas, cuando Jorund llegó a tierra a lomos de una orca. Aunque es una mujer con los pies en el suelo y poco dada a fantasías, la atracción que siente por Jorund y que bajo ningún concepto quiere admitir, hace que llegue a dudar de si el hombre dice la verdad sobre su procedencia.

La novela me ha resultado entretenida. No es que sea para tirar cohetes, pero comparada con su precedente, me ha resultado mucho mas agradable de leer y, en algunas ocasiones, hasta me ha parecido divertida.

Obviamente sigo creyendo que aunque se parte de una base de fantasía un autor debería esforzarse porque su novela resulte creíble, y estas no hay por dónde cogerlas en este aspecto, mira que he leído montones de libros sobre seres sobrenaturales, viajes en el tiempo y demás, y a pesar de lo aparentemente increíbles que pudieran resultar, al leerlo te los creías a pies juntillas. Pero estos no, no he conseguido meterme tanto en la historia en ningún momento para poder sentirme dentro de la misma y creérmela.

Pero bueno, la verdad es que entretenida si que es y tiene un poco más de gracia que la anterior. Los personajes también me han resultado más interesantes y cercanos. Así que me ha gustado más.

Tengo una tercera novela de esta serie. Haré como con ésta; darle un par de capítulos de margen para decidir si la leo entera o no.