Cuando no se sabe cómo vender algo, recurso fácil, se menciona el sexo que parece ser que es infalible como método de marketing para todo. En los últimos tiempos nos están bombardeando con un término que detesto profundamente (y, por comentarios leídos, no soy la única, afortunadamente, que piensa así ni mucho menos): “porno para mamás”. Pues si, a algún (¿alguna?) lumbreras se le ha ocurrido semejante término para etiquetar un género literario (“nuevo”, dicen, aunque de novedoso yo, personalmente, no le veo nada) dirigido al público femenino de entre 35 y 45 años (ummm, ¿tendrá algo que ver que se supone que es una edad en la que se presupone un cierto poder adquisitivo y gasto fácil, según los gurús del marketing?) con escenas “subiditas de tono”.
Puedo admitir que haya quien piense que esto es algo nuevo y que no existía hasta ahora (bien por ingenuidad, bien por ignorancia, bien por desinterés), ¿pero que lo califiquen de “porno para mamás”? ¿Puede hacer un término más tonto, ofensivo, despectivo, machista, denigrante y horrendo? Mira que es difícil… Existen ya términos como la literatura erótica o incluso la literatura pornográfica (según si hay más insinuación o se es más explícito en lo que se narra/muestra), se puede añadir el calificativo “en femenino” o el “para mujeres” si de algún modo se considera excluyente (para el género masculino), ¿pero de dónde sale el “para mamás, por diossss??!!!
El primer fallo (y gordo) que veo (pero no el único) es el equiparar mujer a madre. No todas las mujeres son madres, bien sea por circunstancias propias o ajenas o por propia voluntad. Da la impresión esta etiqueta de que una mujer no puede ser considerada como tal sin mencionar la maternidad y también da la impresión de que la sexualidad no tuviera otro fin que la reproducción aún dentro de la “pornografía” a la que alude (que no nos engañemos, no es para tanto). Parece así un término retrógrado disfrazado de atrevimiento, como si hubiéramos salido de las cavernas más recónditas o para que el puritanismo más tradicional se sienta transgresor por el hecho de comprar/leer uno de estos libros. Tiene un tufo a carca que tira de espaldas.
Admitamos que el sexo, por el sólo hecho de ser nombrado, ya vende, y decir porno ¡guaooo, ni te cuento! Pero para que las pobres mujeres, (¡ay, lo que hay que escuchar!) no nos escandalicemos (¡en fin!) se añade el “para mámás” con la aparente intención de dotarle de respetabilidad, para aligerar la carga de la primera palabra (porno), para darle un baño de ternura al término en un ejercicio descaradamente asequeroso (y asquerosamente descarado) de hipocresía y falsedad. Al pan, pan y al vino, vino. Y lo demás no son tonos de gris, son disfraces del lenguaje.
Las mujeres-madres (¿hace falta infantilizarlo en el mamá en el lugar de madre?) pueden leer novela erótica o pornografía en general o con cierta inclinación hacia el género femenino sin que el hecho de su maternidad excluya ciertas obras ni incluya otras cuya lectura sea negada para las mujeres que no son madres. ¿Acaso hay novelas eróticas sólo para rubias, morenas o pelirrojas? ¿Existe una novela erótica que solo puedan comprender y disfrutar miembros de una profesión y excluya a los que no la ejercen? ¿Qué sentido tiene, entonces, el que se aluda a la circunstancia vital de la maternidad?
Por lo que he leído-comentado ya en varios sitios no he visto a nadie (hombre ni mujer) a quien le guste este término fuera del mundo editorial, entre los lectores. Y no es de extrañar. Leí en Facebook un magnífico comentario de un lector que con buen tino aludía (sorprendido y horrorizado) a que el término le parecía una alusión a la maternidad como fin del sexo como disfrute, algo así como si después de la maternidad una ya sólo pudiera disfrutar del sexo leyendo sobre él, como una fantasía a la que no pudiera ya tener acceso, pues de otro modo no entendía el “para mamás” del término, como si se diese por hecho que las fantasías literarias sexuales fuesen el único escape y recuerdo de lo que dejaron atrás al ser madres y, por supuesto, si esa es la intención de quien haya sido el genio (¿la genio?) que inventó el susodicho término, es denigrante cuando menos. ¿Tan mal andamos, o qué?
Hace unos pocos años desapareció el más famoso Premio Literario que se otorgaba en España a la literatura erótica, La Sonrisa Vertical, y entre los motivos que se dieron para ello el más importante era que en la literatura actual (tanto romántica, como sentimental, como de cualquier otro género destinado a un público adulto) el erotismo e incluso la pornografía era algo que ya se incluía en una gran parte de las novelas, aunque fuera brevemente, y que ya nadie se echaba las manos a la cabeza por ello, motivo por el cual la literatura erótica como tal ya estaba demasiado cerca de cualquier otro género literario para destacarlo y darle dicha calificación, salvo unas pocas excepciones, no tantas como para seguir adelante con un premio tan importante y de tanta dotación económica. Pero parece ser que ahora, en algunos sectores del mundo del libro, se quiere recurrir de nuevo al sexo para vender pero quieren “colárselo” a quien posiblemente no se atrevería a pasear un libro erótico a secas por el metro bajo la etiqueta mucho más light y moderna (ejem, ejem) de “porno para mamás”.
Si habéis llegado hasta aquí, sois los mejores. Os pregunto, ¿creéis que aporta algo nuevo al panorama literario el llamado “Porno para mamás”? ¿Acaso no existen otros géneros literarios donde se ahonda ampliamente en las escenas sexuales explícitas? ¿Qué tiene de especial que la excluya de la novela pornografía o de la erótica? ¿Creéis que esta etiqueta sirve para algo más que como mera campaña de marketing?
Lo primero que me viene a la cabeza es pensar que el término se ha creado para encaminar esas lecturas a un rango de edad con posibilidades económicas, osea, que todo es por dinero.
Se me ocurre también que ni una mujer es menos mujer por no ser madre, y por supuesto, una madre no deja de ser mujer por ser madre.
Por tanto la sexualidad o la elección de la lectura “subida de tono” no creo que tenga que ver con ser madre o no.
Lo que si cambia con la edad es la actitud, la sensibilidad, la percepción y los gustos, por lo que entiendo que puedan haber libros para cierta edad, con una sexualidad diferente.
Incluso puedo admitir, creo que de hecho es asi, que haya porno para hombres y para mujeres.
Como también creo que las lecturas pornográficas son mas del gusto femenino, la sexualidad masculina es otra cosa…es más visual quizás…
En fin, que coincido contigo que el término es, como poco, obsceno.
Unir el térmno mamá y sexo… no gusta.
besos!
Me parece increíble pero esta misma mañana, mientras desayunaba estaba leyendo una revista y descubrí la existencia de “porn mums” que por muy bien que suene en inglés me parece un término de mal gusto, primero porque el término de pornográfico con todo lo que conlleva de imágenes sexuales y del término mamá que usan los niños para llamar a sus madres me parece incestuoso.
Luego concuerdo contigo que siempre ha existido una literatura o una poesía romántico-erótica y que no veo lo que este tipo de literatura aporta al género al no ser darle un nombre para vender más y crear un fenómeno fuera de la nada.
Sin mencionar que excluir a las mujeres sin hijos, por edad, por elección, por salud, o por lo que sea me parece discriminación e insultante.
Lo que si estoy segura, es que la autora ganará muchoooos euros (o $ o lo que sean) por haber dado un nombre más “de moda” que la gente comprará aunque sólo sea por efecto de márketing.
Y me parece otro insulto más a las mujeres(y a las madres…), después del “Mother I’d like to fuck”…las famosas MILF…
Bueno paro de enrollarme, que esto no se acaba, besos :o)
Palmira
Marhya, lo desconocía por completo, pero me parece algo fuera de lugar… ¿porno para mamás? no tiene ningún sentido, como tú dices puedo entenderlo para mujeres, pero mamás?? ¿Hay alguna diferencia respecto al sexo entre las mujeres que son madres y las que no? Pues yo diría que no, evidentemente!
¿Campaña de márketing? ¡Puede ser! Pero para mí equivocada totalmente.
Gracias por compartirlo, me ha gustado leerte. Un besico.
Sis, yo ví el otro día un artículo (yo creo que más publicitario que informativo) sobre esto y el dichoso nombre me resultó horrible. Sin haber leído nada de lo que ellos califican así (ni ganas) por lo que contaba el artículo a mi me dió la sensación, como dice Palmira, de que no aportaba nada nuevo a la literatura/poesía erótica.
Estoy de acuerdo con todo lo que has dicho, Pica. Yo también creo que lo de la edad es porque en términos comerciales es muy interesante, pues igual que etiquetan los libros juveniles por edades, mira, que le pongan una etiqueta de “especialmente recomendado para XXXXXXX ,no me parecería mal, al contrario, te da una pista que puedes escoger o desechar al antojo sin necesidad de recurrir a términos tan asquerosos.
Besos.
Si, a mi el término pornográfico tampoco me gusta en el sentido de que aunque se refiera a sexo más explícito que el erótico, tiene una connotación de explotación que no me gusta nada.
Del otro tema es también para hablarlo, si, porque también tiene lo suyo.
Besos.
Gracias por leerlo, Inma, después de publicarlo pensé si no me había extendido mucho pero es que me parecía que merecía la pena comentarlo.
Eso creo yo, que es una campaña de marketing pero tan equivocada que les ha salido el tiro de la culata, ya te digo que todos los comentarios que he leído-escuchado son totalmente en contra del dichoso término. Se deben pensar que los lectores-consumidores (o, las lectoras-consumidoras) somos tontos y no tenemos criterio.
Besos.
Yo tampoco he leído nada pero viendo lo que comentan quienes nos lo quieren vender, claramente queda a la vista que no, que no aporta nada nuevo.
Un beso!!!!
Yo lo desconocía. Entiendo que lo que pretendían y han conseguido, es que mujeres madres, estemos hablando de ello.
Creo que simplemente es una campaña provocadora y que llega a las mujeres que somos las que más literatura consumimos… qué bien nos conocen!!
Pues no sé si es lo que querían porque supongo que el hablar de ello les interesa si se traduce en ventas y eso puede ser cuando se crea polémica pero en este caso no he leído comentarios a favor entre los lectores, más bien todo el mundo posicionado en contra, así que me da que les ha salido el tiro por la culata.
Besos.
Yo estoy convencida de que es una simple cuestión de marketing. Un titular en el que figura “Porno para mamás”, por fuerza debe llamar la atención.
Por supuesto me parece horrible el término, de hecho ver mi nombre asociado a un artículo titulado así me quitó un poco de la alegría que sentí al ver que se me mencionaba en dicho artículo…..
Lola, es que en el caso concreto del artículo en el que se mencionaba tu nombre, el autor del mismo tenía una caraja mental de cuidado, y mezcló churras con merinas de una forma tal que no sé cómo se puede llamar periodista a semejante incompetente. Obviamente no había leído ninguna de tus novelas y dudo que hubiera leído las otras que se mencionaban.
Un beso.
Pues la verdad es que es la primera vez que oigo este término “porno para mamás” pero desde luego me parece insultante y discriminatorio. Lo que sí que es seguro es que esto venderá porque por desgracia todo lo más denigrante y chabacano es lo que más vende hoy día.
Marhya, yo también me acuerdo del premio “La sonrisa vertical”.
Besitos
rosa
Bufff, tal como lo dices, es verdad, aunque prefiero pensar que cada vez hay más personas que eligen con criterio.
Un besito.
No habia leido ni oido nada sobre este tema,pero desde luego tambien me parece bastante insultante el termino “porno para mamas”.
Desde luego que si, Mari. En fin….
Besos.
No puedo estar más de acuerdo con la autora de la entrada y con los comentarios.
Gracias por dejar tu comentario, Isabel.
¡Feliz día!
Si esa etiqueta sirve para que dé de qué hablar, quien lo haya inventado ha hecho bien su trabajo 😉 Pero si además querían vender, ahí ya la han fastidiado. Desde luego no seré yo quien gaste un céntimo en esa literatura con un nombre tan fuera de lugar.
¿Qué problema hay con la literatura erótica? Quien quiera leerla, que la lea, no entiendo porque hay que añadir etiquetas según qué público… Y efectivamente, si es por femenino, ya es insultante porque no todas las mujeres son madres, eso para empezar. Para continuar con la mención que haces de aquel comentario de facebook… es terrible.
Y en cuanto al premio, ahí debo de decir que me da pena que haya desparecido el premio “La Sonrisa Vertical”, cierto es que no lo conocía (el nombre me suena mucho), pero no deja de ser una pena que no haya suficientes libros como para otorgar un galardón.
¡¡Un beso guapa!!
Ana, igual no me he explicado bien, el comentario de FB justamente criticaba el término y decía que le sonaba como si quien lo hubiera puesto pensase eso, lo que le parecía terrible.
Un besazo!
No, perdóname a mí, he sido yo quien no escribió correctamente ayer… Quería decir que también estaba de acuerdo con el comentario de FB. A lo que me refería como terrible era a la conclusión que daba de que se acaba el sexo cuando eres madre…
¡Un besazo!
ah, que nos hemos liado. Pues si, es una conclusión terrible.
[…] Sobre el (horrible) término, porno para mamás: Me siento acompañada en este loco mundo literario y real cada vez que alguien se muestra de […]