La niña del andén, de Gill Thompson, es una de las últimas novelas que he leído. Aunque visto el título, sinopsis oficial e ilustración de portada creí que el tema central eran los viajes de los niños de la guerra desde Europa continental hasta Gran Bretaña, lo cierto es que esto es solo una pequeña parte de lo que cuenta la novela.
De qué va la niña del andén.
Las dos protagonistas principales de esta novela son dos mujeres: Eva y Pamela.
Praga, 1930. Eva es una adolescente judía con un talento especial como pianista. Una tarde, al regresar del conservatorio, ataja por el cementerio para no retrasar más su vuelta a casa, aunque su madre le ha insistido en que solo camine por calles principales. Demasiado tarde se da cuenta del por qué de las indicaciones maternas, cuando es agredida y violada por unos miembros de las juventudes hitlerianas.
Londres, 1933. Pamela es la esposa cuáquera de un cargo importante del Ministerio de Exteriores. Tiene un hijo de once años, Will, y una vida holgada que poco tiene que ver con la que llevaba en casa de sus padres, lo que la provoca cierto sentimiento de culpa y el deseo de emplear bien su tiempo y dinero. Por eso se dedica a labores humanitarias, como la recogida de ropa y comida para los niños alemanes cuyas familias comienzan a ser perseguidas y señaladas.
Estas dos mujeres viven en países diferentes, tienen distintas edades, una religión y estilo de vida que en nada se parecen entre sí. Sin embargo, posteriormente en el tiempo, sus vidas se cruzarán.
Mi opinión sobre esta novela de Gill Thompson.
Aunque, según nos dicen, la novela está inspirada en la labor humanitaria de Nicholas Winton que salvó a cientos de niños que escaparon del Holocausto gracias a los trenes del Kindertransport, en realidad esto es solo parte de lo que cuenta. La autora ha usado ese punto de partida para crear una novela con entidad propia que cuenta mucho más.
En realidad, es una historia de mujeres, de niños y de guerra. De la lucha por la supervivencia y de cómo las pequeñas decisiones y acciones de cada uno pueden influir en otros para bien o para mal.
La historia de La niña del andén comienza en los años previos a la Segunda Guerra Mundial y termina más allá de los juicios de Nuremberg. Entre medias habla de cuestiones como los sacrificios personales, el instinto de supervivencia, el valor de la solidaridad, la importancia de mantener el ánimo a flote incluso en la desgracia (por uno mismo y por los demás), cómo es crecer lejos de tu familia sin saber si están bien o han muerto…
Como puedes imaginar, la ambientación de la novela y su trasfondo histórico real hacen que no sea la alegría de la huerta. Tampoco es una novela morbosa y cruenta. Aunque no tiene miedo de mostrar la cara más dura de aquellos momentos, se centra en la vida de estas dos mujeres, Eva y Pamela. En la Praga ocupada, en el Londres bombardeado, en campos de concentración, en la ayuda humanitaria…
Creo que es una novela bien escrita. Engancha y te tiene en vilo. Y a pesar de la temática y la ambientación en aquellos años oscuros es entretenida. Es difícil ponerle etiquetas. Pero si te gusta leer sobre mujeres con coraje y sobre aquella época tenebrosa, probablemente La niña del andén te gustará.
