Una de las localidades más conocidas de Palencia es Carrión de los Condes. Situada en El camino de Santiago es una maravilla para el turista porque en ella podemos encontrar variados establecimientos hosteleros (entre ellos un camping, un parador nacional y un camping de caravanas), museos (el de arte contemporáneo, el de las Madres Clarisas, el de Santiago), mucha arquitectura histórica que contemplar y hasta un río en el que bañarse, pescar o junto al que pasear.
Uno de sus atractivos naturales es el río Carrión que atraviesa el pueblo y da nombre a la ciudad, flanqueado por árboles en sus orillas. Junto a él en una orilla el parque conocido como el Plantío y una zona con mesas y bancos de madera así como barbacoas de piedra que especialmente con la llegada del buen tiempo son punto de encuentro de familias y grupos de amigos. En la otra orilla, las piscinas descubiertas que también son punto de diversión en los mejores días de verano.
El Puente Mayor que atraviesa el río data del siglo XVI (derribado entonces el medieval que ocupaba su lugar).
Mientras en una orilla del río encontramos el casco urbano y buena parte de las cosas que ver en la localidad (hablaré más de ello en una próxima entrada), en la otra podemos encontrar, entre otras cosas interesantes, el Monasterio de San Zoilo, hoy reconvertido en Parador Nacional. De la primera comunidad del monasterio se cree que era mozárabe bajo la advocación de San Juan pero en el 1077 fue sustituido por la benedictina. Con posteriores remodelaciones y añadidos, su puerta norte es Barroca, pero si hay algo que merece la pena verse por encima de lo demás en el monasterio es su precioso claustro plateresco.
Casi frente al Monasterio existe una Calzada que en realidad no es tal pese a su apariencia, si no los restos de un antiguo dique de contención del río Carrión construido para evitar inundaciones. Si se construyó sobre la vía romana que llevaba a Astorga es aún un misterio que tal vez se desvele alguna vez.
Carrión de los Condes alberga numerosas casas solariegas blasonadas y un teatro, El Sarabia (edificación burguesa) que forma parte de la Red de Teatros Históricos de Castilla y León y que suele ofrecer espectáculos a lo largo de todo el año.
En la próxima entrega, os contaré más cosas de esta localidad.
¡Qué abandonada está la ancha Castilla y León! Ya te habré comentado en alguna ocasión que mis padres son de la tierra, y muchos pueblos de los que sólo ves el adobe desde la carretera, esconden mucha historia. Es una tierra bella, pero poco explotada turísticamente hablando, y se merece que la Diputación invierta en conservar lo que tiene para atraer al turismo, porque es una tierra bella.
Yolanda, aquí hay una riqueza muy desconocida que ya la quisieran en muchos sitios, no está explotada en el mejor sentido de la palabra y es una pena. Mantener tantos lugares con valor artístico, arquitectónico, etc… debe ser complicado en provincias como Palencia, Zamora o Soria que están tan poco pobladas, por eso es importante que se conozcan, porque el que venga gente a visitarlas las pone en relieve, las hace visibles. Y bueno, los pueblos que de momento os estoy enseñando como Carrión de los condes o Villalcazar de sirga reciben bastantes visitas por estar en el camino francés de Santiago, y ahora en verano muy especialmente suele haber ademas autobuses llenos de turistas extranjeros (sobre todo alemanes y japoneses).
Iré poniendo algunos lugares más.
Besos.
Me encanto el post. Me fascina la historia, lugares asi me gustaria visitar.
Gracias Bella por compartir Tu Terre… 😉
Cotty, espero iros poniendo alguna fotografía más de la zona. ¿Se prevee viaje transoceánico?
¡Besos!
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