Me habían hablado muy bien de “Lady Johanna”, de Julie Garwood. Sin embargo la novela no me ha logrado entusiasmar. Lo mejor que puedo decir de ella es que está bien ambientada y no está protagonizada por personajes atemporales si no propios de su época, algo que en la novela romántica medieval no abunda (salvo honrosas excepciones, como “Cautivos del Destino”, que es extraordinaria).
Inglaterra, 1206. En la Edad Media es difícil ser mujer, cuando la mayor parte de los hombres (y la poderosa Iglesia) creen que la mujer es la última en el amor de Dios (por detrás de todos los demás seres vivos) y que es la culpable de todos los males del mundo. La mujer no vale nada (o muy poco, en realidad).
Lady Johanna lleva tres años (desde que era casi una niña, aún) casada con un cruel Barón que no la trata nada bien. Por eso recibe con gran regocijo la noticia de que su esposo a fallecido. Lo que no sabe es que pronto deberá casarse nuevamente, algo que ella evitaría a toda costa si pudiera. Pero su hermanastro Nicholas no dejará que lo haga con cualquiera y ya ha elegido como cuñado a un highlander brusco pero de buen corazón, Gabriel McBain, de quien no dura tratará bien a Johanna.
La novela viene bien recomendada pero a mi me ha dejado bastante fría. No puedo decir mucho malo de ella, pero tampoco casi nada bueno. La he leído sin entusiasmo y la he terminado igual. Simple pasa ratos, sin nada de especial.
La novela está publicada por Zeta bolsillo, consta de 461 páginas y cuesta 10 euros.
