Hace unos años tomar té nos parecía algo refinado y ocasional, hoy es ya un producto común que se utiliza tanto para preparar riquísimas bebidas frías y calientes, pero también para recetas de cocina. Hay distintos tipos de té y cada uno tiene unos usos diferentes. Si quieres conocer más sobre tés visita la fuente.
A principios de año comenté que este año iba a publicar más sobre ingredientes y hoy le toca el turno al té. Si eres amante del té seguro que tienes tu favorito. Si no lo eres, no sabes lo que te estás perdiendo. El mío es el té negro earl grey, que lo mismo tomo caliente que frío. El té helado es ideal para tomar en verano para refrescarte e hidratarte de forma saludable y ligera entre horas.
Después de doce años y pico publicando recetas en este blog estoy haciendo mi lista particular de ingredientes que ir incorporando a estas con ideas de cómo utilizarlos. No hablo tanto de ingredientes novedosos sino de aquellos que ya uso pero no para cocinar con ellos. Y entre estos están los tés, que tienen mucho que decir como ingrediente para la elaboración de recetas de cocina y que raramente faltan en alguna casa, pero que habitualmente solo utilizamos como infusión.
Tipos de tés y sus usos en la elaboración de recetas de cocina.
Té negro.
Le nombro el primero porque como ya contaba más arriba es mi favorito. Y porque ya lo he usado anteriormente para preparar tarta de manzana con té negro earl grey. Su sabor es marcado e intenso y por ello debe utilizarse con moderación y con ingredientes cuyo sabor no quede opacado por este, sino acompañado por él. En guisos de carne como ternera, cordero o jabalí, se puede usar en lugar de otros líquidos como los vinos o licores.
En cuanto se alejen los calores fuertes del verano creo que será una de los primeros platos con té que haré. Un guiso sencillo, con un cocinado lento y los matices de sabor únicos y especiales del té negro.
Dentro de las distintas variedades de té negro vuelvo a destacar el earl grey, sencillamente porque me encanta. Este va muy bien con un toque cítrico así que tengo que experimentar con las cantidades exactas para combinar ambos sabores en un mismo plato. Mi idea es preparar una salsa para un bizcocho de chocolate pero no solo en dulce, también se pueden usar para platos salados. Tengo en mente un aliño para ensaladas de carne que combina ambos.
Té matcha.
El té matcha es un boom en la cocina. Especialmente en la repostería. Además de por su sabor y aroma por el bonito color verde de las preparaciones elaboradas con él. Solo basta dar una vuelta por instagram para acceder a recetas de repostería con té marcha entre sus ingredientes como ligeros bizcochos y atrayentes macarons.
La verdad es que el boom del té matcha en la repostería tiene un motivo y es que aporta unos matices fantásticos.
Té blanco.
Es muy suave y en la cocina hay que utilizarlo con ingredientes de sabores también suaves para mantener un equilibrio y que ninguno opaque al otro sino que se acompañen de forma adecuada. En la cocina se utiliza sobre todo con frutas y verduras, pero también en platos de pollo o de pescados blancos.
Una gelatina suave hecha con té blanco y agar agar es un precioso velo para una macedonia de frutas, por ejemplo. Y su infusión granizada perfecta para servir con frutas del bosque. Ahora que se acerca el tiempo de las moras, es buen momento para probarlo.
Té verde.
En la cocina el té verde va bien con verduras, pollo y pavo así como con pescados. Y, lógicamente, en postres frutales o con chocolate sea negro o blanco. Ya os veo a todos los golosos imaginando un buen postre de chocolate y té verde para el otoño e invierno, en bizcochos o galletas. ¡E incluso en chocolatinas! Yo estoy pensando en un turrón de chocolate blanco, almendra y pistacho con té verde. No me digáis que no apetece.
Pero antes hay tiempo para utilizarlo granizado con pomelo. O como ingrediente para sopas frías, por ejemplo con guisantes.
Té rojo.
¿Sabías que el té rojo es estupendo para rehidratar setas secas? Esto lo he descubierto hace poco y como ambos son ingredientes que tengo en casa no me he resistido a probarlo. El resultado es aromático, suave y muy agradable. El día que lo probé simplemente cocí las setas y luego las aliñé en frío pero ahora que ya sé lo bien que queda lo utilizaré más a menudo en arroces y guarniciones. Ya lo veréis más adelante en el blog.
El té rojo también va muy bien en guisos de pollo y con frutas carnosas y con sabor marcado como las ciruelas o los melocotones. Un guiso de pollo con melocotones al té rojo es algo que quiero preparar antes de que termine el verano.
Té rooibos.
Este tipo de té se utiliza sobre todo en recetas de cocina dulces. He probado galletas de té rooibos y también rosquillas al horno elaboradas con él y bañadas con una glasa de limón suave. Aunque aún tengo pendiente cocinar yo misma con él.
Utilizado con equilibrio es muy rico. También va muy bien con frutos rojos, ya sea para postres, salsas dulces o incluso para salsas para pollo o pavo.
Los distintos tipos de tés se utilizan en la cocina siempre con moderación cuando cocinas con ellos por primera vez. Porque siempre es más fácil concentrar más el sabor que aligerarlo. Y recuerda que puedes infusionar otros líquidos además del agua para utilizar el té en la cocina. Por ejemplo leche o nata para salsas, pero también caldos, entre otros.
Si ya has probado alguno de estos tipos de té en platos de cocina dulces o salados me encantaría que compartieras la experiencia. Y si los has preparado tú mismo, también. El té es un ingrediente que a menudo tenemos en casa para beber y no podemos desaprovechar la oportunidad de preparar y probar nuevos platos utilizándolo en la preparación de nuevas recetas de cocina.
Nunca se me ha ocurrido usar el té para cocinar. Con estas sugerencias que nos haces hoy tengo que probar con distintas recetas de cocina, que me dá que nos van a gustar.
Cuando he leído eso del té verde con pomelo se me ha hecho la boca agua, ya que el pomelo me encanta y con té tiene que estar de vicio.
Besos preciosa.
Yo no he cocinado con té. Pero mí cuñada hace unas galletas de matcha que me gustan muchísimo.
Claro, Lucereo, a veces tenemos ingredientes “exóticos” en casa y no nos damos cuenta de que podemos sacarles mucho más partido.
Besos.
¡Ay, Paqui, que nos ilustre tu cuñada, tienen que estar muy ricas!
Besos.