Esta sencillísima tarta de piña y coco (y fresas, si os estáis preguntando qué es eso rosa que se ve dentro de cada aro de piña) la preparé hace pocos días para una celebración. Es muy fácil de hacer y es riquísima, suave y ligera, y después de una comida copiosa y sabrosa entra muy bien, no se hace pesada la digestión.
Para hacerla me he inspirado en el pastel de piña invertido de Nigella Lawson, que aparece en su libro “La cocina de Nigella Lawson“, pero la verdad es que he hecho unos cuantos cambios. No queda tan bonito como el del libro (principalmente porque los fresones pierden parte de su agua y quedan blanditas y encogidas y transmiten parte de su color, no como las guindas en almíbar que emplea ella, y porque lo he hecho en molde de silicona sin azucarar la fruta) pero el toque del coco que ya sabéis lo bien que casa con la piña, la hace deliciosa e irresistible. Os animo a probarla porque da muy poco trabajo y es muy, muy rica.
Ingredientes:
una lata pequeña de piña al natural
5 fresones
100gm de harina
100gm de mantequilla
100gm de azúcar
1/2 ct levadura química
2 huevos
25-35gm de coco deshidratado rallado
2Cd zumo de piña
1Cd brandy
Preparación:
Poner en un cuenco la mantequilla reblandecida o a punto pomada, los huevos cascados, la harina tamizada, el azúcar, el zumo de piña (el jugo de conservación de la propia piña) y el brandy junto con la levadura química y batir hasta obtener una crema homogénea.
Disponer sobre un molde de tarta o quiche las ruedas de piña; poner un fresón dentro de cada aro de piña y otro en el centro del molde.
Verter la masa en el molde; apenas llegará a cubrir la piña.
Introducir en el horno ya caliente a 175ºC y cocinar durante unos 30 minutos.
Desmoldar dando vuelta sobre un plato (somo si diéramos vuelta a una tortilla de patata al cocinarla). Dejar templar antes de espolvorear con el coco rallado.
Esta tarta de piña invertida fue de las primeras que aprendí a cocinar cuando me casé , allá por….bueno casi ayer mismo jajaja….
Lo que no he hecho nunca es ponerle el coco y tienes razón que casan a la perfección, asi que la próxima vez, asi la haré.
Besinos guapa.
Bego, para cambiar seguro que te gustará el toque de coco, es que hacen una pareja buenísima. Y eso que sola, como tú dices, ya está impresionante.
Besos.
Marhya esta tarta con la frescura de la piña debe estar riquísima, si como tú dices no se hace pesada es ideal para esos días en los que tienes invitados y cocinas de más. Gracias por compartirla.
Me alegro mucho de que te guste, Lola.
Besos.