Barbacoa de verano. Uno de los pequeños grandes placeres de la temporada son las barbacoas caseras; cosas ricas, buena compañía. No hace falta complicarse la vida, sólo tener ganas de comer bien y de pasarlo bien. Y si además el que pone la mano para preparar el fuego y la comida es otro y nos dejan relajadamente con una copita de vino y un buen aperitivo, ¿qué más se puede pedir?
Disfruta de la barbacoa que seguro te lo mereces, yo siempre estoy en el fregao, me encantan las barbacoas y todo lo que acompaña
besos
Muchas gracias, Luisi.
Un besote.