Tierra de lobos, de Nicholas Evans, es una novela que se publicó en España en 1998. Una historia ambientada en un pequeño pueblo de Montana, protagonizada por quienes aman y quieren salvar a los lobos y por aquellos que los ven como el ser que amenaza su estilo de vida y su sustento. Una novela escrita por el autor de El hombre que susurraba al oído de los caballos.
Hope, Montana. Un día cualquiera un lobo desciende de las montañas y se acerca a los ranchos de la zona. Kathy Hick, Coleman de soltera, trajina en casa mientras su bebé permanece al fresco sin imaginar el peligro que corre. Afortunadamente la intervención del perro de la familia salva al niño aunque el can muere en el ataque. El ataque enfurece a Buck Coleman, padre de Kathy y uno de los rancheros más poderosos de la zona. Dispuesto a acabar con los lobos de una vez por todas, hará lo que sea necesario para evitar que estos ataquen al ganado y pongan en riesgo el estilo de vida de las gentes de la zona.
Helen Ross es una joven bióloga especialista en lobos. Su antiguo jefe la contrata para trabajar en Hope, identificar cuántos lobos hay, ponerles un collar protector y evitar riesgos tanto para estos animales como para los habitantes de la zona. En un momento vital difícil para ella llega al lugar, sin saber que con el trabajo para poner a salvo la conservación de la especie también llegará su propia salvación personal.
Leí Tierra de lobos hace muchísimos años aunque ya casi no recordaba nada cuando volví a leerlo, hace unas semanas. Tenía el recuerdo de que era una novela bonita, que disfruté en su momento, pero prácticamente nada más. Y me ha gustado mucho volver a leerlo porque me ha encantado. Además estoy segura de que en este momento me he fijado en cuestiones a las que quizá no di tanta importancia entonces, simplemente por una cuestión de edad (de mi edad).
La historia no solo habla de lobos, del conservacionismo y del no siempre fácil equilibrio entre la protección de especies amenazadas y el ser humano. También habla de personas, de relaciones y de formas de vida. Entre las relaciones, una de las más difíciles es la que tienen Buck Coleman y su hijo Luke, un joven de 18 años sensible y con un problema de dicción que su padre ve como debilidad e inutilidad. Ambos tienen ideas diametralmente opuestas sobre la presencia de los lobos en las inmediaciones de Hope y eso viene a sumarse al silencioso enfrentamiento entre ambos. Es, también, la oportunidad de Luke para crecer como persona y superar las dificultades de la niñez y la adolescencia.
Me atrevo a decir que Tierra de lobos estará disponible para el préstamo en cualquier biblioteca pública bien surtida. Y también en ventas de segunda mano. Es una novela preciosa que creo que merece la pena leer, sea cual sea tu idea sobre el lobo o sobre el conservacionismo. A mi me ha encantado y aunque no tenía pensado leerla tan rápido, sobre todo por su extensión, ha volado en un fin de semana. Y es que una vez que la empiezas, cuesta mucho dejarla de lado y solo quieres leer más y más.
Además la forma en que está narrado es envolvente. Quizá a algunas personas tramos les parezcan lentos pero si le das una oportunidad y no te impacientas, verás que logras sentirte dentro de las montañas y casi respirar el aire frío del bosque. Merece la pena.
Lo voy a buscar porque por lo que cuentas me dá que este libro me va a gustar. Hace tiempo leí “El hombre que susurraba…
y además de gustarme la historia me encantó la forma en que este hombre escribe.
Besos y buen fin de semana.