La petición de Olivia, de Abril Camino, es una novela que esperaba quizá algo más romántica de lo que finalmente ha resultado, aunque no tenía expectativas muy concretas vista su sinopsis. Y creo que ha sido lo mejor, porque así me he metido de lleno en su lectura sin que ideas previas me hicieran sentir de uno u otro modo.
Olivia tiene 35 años y ha decidido que ha llegado el momento de ser madre. Es algo que lleva muchos años pensando pero sabe que no puede esperar más. No tiene interés en encontrar una pareja con la que serlo, esos sueños ya quedaron muy en el pasado. Va a ser madre soltera. Pero sí sabe quién quiere que sea el donante: su mejor amigo desde la infancia y desde hace ya diez años ex marido, Taylor Gadner.
A pesar de lo mal que lo pasó Olivia con su divorcio, lo que un día fueron, los mejores amigos, hace que quede cierto cariño entre ellos. Una vez al año cenan juntos. Y es en una de esas cenas en las que Olivia hace a Taylor su petición. Pero Taylor tiene unas condiciones que Olivia acepta y que van a dar un giro a lo que era una separación relativamente amistosa.
Este punto de partida y en el que no quiero colar un spoiler, ya que la sinopsis oficial no lo incluye, aunque es algo que ocurre en las primeras páginas de la novela, es en buena parte lo que no me ha dejado disfrutar del todo de la historia. Porque me ha parecido bastante irreal. Y cuando algo no termina de parecer factible o creíble, me cuesta mucho meterme dentro de la historia.
Lo mejor de la novela es la forma de escribir de la autora. Eso me ha gustado mucho. Cómo se expresa, cómo muestra los sentimientos de los personajes. Pero no ha sido suficiente para que me haya sentido parte de ella. La premisa de partida que no quiero destripar unida a que se centra tanto en una cuestión y gira tanto sobre ella que ya pensaba que nunca iba a haber una resolución al conflicto. Y cuando esta resolución al fin ha llegado me ha parecido que en realidad nada había cambiado y que por qué ahora si y unas páginas antes no.
Entiendo que es difícil comprender lo que trato de expresar hablando tan en abstracto pero no quiero caer en spoilers. Si ya has leído La petición de Olivia, sé que sabes perfectamente a qué me refiero.
Dicho esto, quiero dejar claro que a quien el punto de partida no le resulte irreal, casi seguro que va a disfrutar de la novela. Porque está bien escrita, porque es atrevida, y además la protagonista es un personaje fuerte y con las cosas claras. Esto es algo que suele gustarme mucho y que aprecio de La petición de Olivia.
Además, estoy segura de que la ambientación va a gustar a muchos lectores. A mi el mundo de la moda, ni fu, ni fa. Y Nueva York es una ciudad que no me atrae nada. Es más, no sabría decir muy bien por qué pero hasta me genera cierto rechazo (vale, me preparo para la lapidación). Pero sé que hay montones de personas cuyo sueño es conocer Nueva York o vivir una temporada en la ciudad, y seguro que les va a encantar sentirse como dentro de ella. Os animo a leer La petición de Olivia.