Septiembre está a la vuelta de la esquina y la cuesta que le acompaña es larga y empinada para la economía doméstica, en especial si hay niños en casa, por aquello de la vuelta al cole. Pero no sólo por ese motivo es Septiembre uno de los peores meses para los presupuestos familiares: también está el cambio de estación que implica ciertas compras importantes (por ejemplo ropa) y el pisar con los pies en la tierra depués de algún excesillo veraniego.
Para colmo este año parece que Septiembre llegará acompañado de una crisis económica a nivel mundial, con despidos, subidas de precios y todo lo que ello implica. Una vez más a los ciudadanos de a pie poco nos queda más que ponernos las pilas y tratar de capear el temporal del mejor modo posible. Cómo hacerlo es lo complicado, así que vamos a intentar recopilar ideas para lograrlo.
* Planificar la “vuelta al cole“:
– Es importante revisar el material que tenemos en casa y no comprar aquello que podamos aprovechar del curso anterior. A menudo compramos cosas innecesarias, ¿realmente no está en buen estado para su uso la mochila, el clasificador o los diccionarios, por ejemplo? ¿no puedes aprovechar el estuche, los juegos de reglas o el compás del curso pasado? ¿de verdad no tienes en casa bolígrafos, pinturas o rotuladores? Seguro que puedes aprovechar mucho más de lo que crees. Si a medio curso hay que renovar material, ya se hará, pero lo más probable es que no sea necesario comprar ahora de todo.
– Compara precios. No por ser algo sabido es menos verdad. No te dejes engañar por promociones que te supondrán más gasto (si te dan un vale de descuento te obligan a comprar algo que a lo mejor no necesitas o que te sale más caro en ese mismo establecimiento). Si tienes que comprar los libros de texto en un lugar en el que hagan el máximo descuento permitido por ley y el resto d material en otro u otros establecimientos, hazlo. El ahorro puede ser tremendo y sorprendente de unos comercios a otros.
– Compra la ropa de los niños en función de lo que necesiten, lo que no sea necesario déjalo para el mes siguiente, no todo debe comprarse en Septiembre por norma. Ten en cuenta cuánto va a usarlo, usa el sentido práctico y no sólo el estético y la moda de la temporada, y no olvides que el niño va a crecer a la hora de comprar la ropa de abrigo, que acostumbra a ser la más cara.
* Organizarse en casa:
– Con la bajada de las horas de luz y la llegada de los primeros fríos, es el momento de ver si nuestra casa está preparada para el cambio de estación. Comprueba que todas las ventanas cierran correctamente y pon burletes si es necesario (lo ahorrarás en calefacción enseguida), cambia las sábanas de verano por las de invierno y no te tiemble la mano a la hora de poner las mantas: guíate por el termómetro y no por el calendario. Es absurdo encender la calefacción y no poner una manta en la cama, por ejemplo.
– Recuerda que los productos de temporada son más económicos y están en su mejor momento de nutrientes y sabor. Aprovéchate de ellos. Es temporada, entre otros alimentos, de uvas (para el postre, en pinchos con queso, para añadir a las ensaladas…), de moras (si las encuentras silvestres, más económicas y más ricas imposible, y una buena excusa para ir de excursión. Si coges muchas, puedes conservarlas en mermelada. Si son pocas, perfectas para una tarta.), de pimientos morrones (si puedes asarlos y congelarlos o embotarlos, tendrás pimientos para épocas en que estén más caros), de manzanas (además de para postres, puedes cocerlas como salsa para filetes o chuletas de cerdo y añadirla a ensaladas, por ejemplo)…
– Ten presente que la subida de la tarifa eléctrica se notará especialmente a partir de estas fechas: ahora más que nunca es primordial no dejar los aparatos eléctricos en Stand Bye cuando no se usen, mejor desconéctalos. Si aún no las tienes, sustituye las bombillas convencionales por bombillas de bajo consumo: aunque te parezca que son caras verás que su compra se amortiza pronto. Aísla bien la casa para evitar que se marche el calor de la calefacción.
* Ideas para el ocio:
– En estas fechas muchos ayuntamientos abren el plazo para apuntarse a actividades de ocio, deportivas, cursos de manualidades, etc… por precio muchísimo más económico que en academias o gimnasios. Infórmate y haz la preinscripción antes de que sea tarde: en algunos lugares se atienden las solicitudes por orden de llegada y en otros se realiza un sorteo entre todas las pre-matrículas.
– Las instituciones (ayuntamientos, diputaciones, etc…) y algunas entidades (cajas de ahooro, fundaciones culturales) acostumbran a realizar actos culturales gratuitos a un precio realmente bajo: exposiciones, conciertos… Pide la agenda cultural que suelen editar y tendrás un montón de actos interesantes a los que acudir gratis (o casi).
Hablando el otro día con una amiga, precisamente decíamos que no hay peor cuesta que la de septiembre. La de enero es relativa, depende de lo que te sumerjas en el consumismo, pero la de septiembre es inevitable, colegios, contribuciones, ropa de los niños , calzado… bueno, volvamos a la rutina y apechuguemos como se pueda.
besitos maby
¡Hola Pica!
Pues si, yo no puedo decir mucho porque no tengo niños pero es lo que veo a mi alrededor y de mis recuerdos de estudiante que tampoco ha pasado tanto tiempo. Además que en muchas cosas se sube, por norma, el precio cada Septiembre y cada enero, así, “porque toca”.
En fin, lo llevaremos lo mejor que podamos.
Un beso.