Desde hace unos 6 años tenía en casa sin leer La esclava del sultán, de Katie Hickman. Ya ni existe la editorial que lo publicón, El Andén. Por diferentes razones he ido priorizando otras lecturas y se ha ido quedando atrás, pero este verano que estoy empeñada en sacudir el polvo y leer una parte de los pendientes que tengo, al fin le ha llegado el turno. Y me alegro, porque me ha gustado mucho. ¡Son 476 páginas que te tienen pegada al libro deseando saber más!
Constantinopla, 1599. Celia, una hermosa joven rubia, llega al harén del Sultán como un regalo, junto a otra joven, Annetta. Ambas fueron capturadas dos años atrás, cuando navegaban rumbo a Inglaterra en el barco capitaneado por el padre de la primera. La deslumbrante belleza exótica de Celia puede llegar a convertirla en la favorita del sultán, y esa posibilidad hará que entre las mujeres más poderosas del serrallo (la madre del sultán, la actual favorita, las sirvientas de mayor rango…) se desate una guerra velada, una lucha por el poder en la que todo valga.
Celia, sin embargo, es ajena a todos los hilos, empujones y acciones que pueden modificar su vida y su destino. No está familiarizada con ese tipo de vida y, por supuesto, no quiere estar ahí. Su sueño sería que el Sultán no la tocase nunca y poder regresar a su vida anterior, cuando estaba prometida a Paul Pindar.
Oxford, en la actualidad. Elizabeth, investigando para su tesis, descubre el fragmento de un documento que habla de una joven inglesa que vivió siglos atrás en el harén del Sultán otomano. Un problema sentimental la espolea a huir y en un impulso decide viajar a Estambul e investigar sobre dicha mujer, Celia Lamprey, de la que sabe fue prometida de Paul Pindar, mercader de la Compañía de Levante y embajador de su majestad en Constantinopla.
La esclava del sultán es una novela que me ha gustado mucho, me ha atrapado de principio a fin. Es una historia de intriga e intrigas palaciegas o más bien de intriga e intrigas en el serrallo.
Mientras Elizabeth trata de investigar qué ocurrió con Celia Lamprey, vamos leyendo en capítulos alternos la investigación y lo que le acontece a Elizabeth y lo ocurrido en 1599 en unos pocos días con la propia Celia.
La novela aúna varias intrigas, no sólo lo que el destino deparará a ambas protagonistas de la novela (la pasada y la presente), también en la narración histórica, que es la que tiene un peso muchísimo mayor y la que ocupa la mayor parte de la novela, qué pasa con otros personajes que no mencionaré y que van apareciendo, dentro y fuera del harén, y una intriga creciente por las luchas de poder dentro del harem, tan crueles y despiadadas como sibilinas y tácticas, igual que cualquier otro tipo de guerra.
Desde luego no era fácil la vida en el harén y no sólo porque nadie llegase allí voluntariamente. Los pactos, las traiciones, los peligros… estaban a la orden del día. Nadie podía fiarse de nadie… o casi. Era una lucha diaria por el poder, pero también por la supervivencia propia (y de sus vástagos quienes los tenían).
Que el título no te induzca a error; no estamos ante una novela romántica. La esclava del sultán es una novela histórica y sobre mujeres, podría quizá también encuadrarse entre cierto tipo de novela sentimental, salvando las distancias.
Sé que existe una segunda parte de esta novela, pero no se ha publicado en España. Mucho me temo que sea un problema de derechos y al no existir ya la editorial de la primera, no llegue a editarse nunca. Y es una pena, porque si no me lo compraría ahora mismo, tanto me ha gustado ésta.
La esclava del sultán está descatalogada (ya digo que la editorial que lo publicó en España ya ni existe) y no sé cómo de numerosa fue la tirada que se hizo en su momento, si será fácil o no encontrarla de segunda mano.
[…] unos días os hablaba de cuánto me gustó la novela “La esclava del sultán“. La novela está muy bien ambientada tanto en la Estambul actual como en la antigua, cuando […]