Son muchas las autoras que utilizan diferentes nombres para firmar sus libros, en función del género al que pertenezca cada novela. Sherrilyn Kenyon utiliza este nombre para sus novelas contemporáneas de acción y romance y para las historias paranormales, pero firma como Kinley MacGregor sus novelas medievales. “Actitud provocadora” es la primera novela que leía de ella con este pseudónimo (sólo había leído dos medievales), pertenece a la serie BAD. La novela me ha tenido enganchada de principio a fin (vamos, la he leído de tirón) pero debo decir que me ha gustado, con matices.
Si lo que te apetece es leer una novela de acción con romance, estás de enhorabuena, la novela ofrece justamente lo que promete: acción, ciertas dosis de misterio, una historia de amor con una intensa tensión sexual… Pero (si, hay un pero) la novela tiene algo que no me ha gustado y es ese afán de algunas autoras (me ha pasado también con otras) de elevar a los altares el patriotismo yankie hasta límites insospechados, hasta el punto de justificar el asesinato a sangre fría siempre, claro está, que sea por el bien de la patria (de la patria estadounidense, por supuesto, porque todo lo que está bien para ellos no es así siempre que sea en nombre de otras patrias, claro). Ese alegato que la autora hace de su patriotismo exacerbado no me gusta nada, y en la novela alcanza su máxima expresión en la protagonista. Al menos el protagonista masculino es un contraputno interesante, pero Sherrilyn Kenyon pone demasiado empeño en mostrarnos lo buena que es la protagonista y cómo logra convencer al macho para llevarle por el camino recto, y eso me repatea.
Si no sois tan tiquismiquis como yo y os gustan las historias de acción y romance, entonces seguro que os gusta, porque eso lo ofrece y lo hace bien, si acaso con un final un poco precipitado pero con algún interesantísimo giro en la trama. Porque si dejamos de lado las cuestiones morales o de ideas, la historia está bien escrita, eso no lo voy a negar.
La historia está protagonizada por un hombre que permanece en prisión por disparar a un superior en plena guerra irakí. Un día unas personas se ofrecen a sacarle de la misma a cambio de que realice un trabajo de vital importancia para la seguridad del país para la que es necesario un francotirador de honradez y gatillo fácil reconocidas. El problema es que él no quiere volver a disparar contra nadie, pero también aborrece la idea de tener que pasar 20 años en una prisión militar.
La novela publicada por Terciopelo tiene 297 páginas y se vende por 6,95 euros.