Tenía mucha curiosidad por “Flores y sombras”, de Lian Hearn, y también cierto miedo, la impresión de que me atraparía desde el principio o sería un tostón de los de abandonar a las pocas páginas, y mucha intriga por descubrir una cultura, un país y la historia interna del mismo que resultó a la postre tan importante para la historia mundial, y que me resultaba totalmente desconocido. Y la verdad es que leerlo ha sido abrir una puerta a otro mundo. Debo reconocer que al principio me costó un poco meterme en la historia, no por la narración, si no porque los nombres de personas y lugares (a pesar del mapa y de la guía de personajes que viene al principio del libro y que de tanta ayuda sirve) me sonaban todos tan ajenos que no terminaba de ubicarme y de ubicarlos, pero la narración era tan atrayente que no me di por vencida y me alegro muchísimo de haber seguido adelante, porque me ha encantado haber podido disfrutar de esta novela. Quizá también me hubiera ayudado algunas notas a pie de página porque hay términos que me resultaban totalmente desconocidos y que sólo por pura deducción lograba encontrarles sentido, pero hubiera sido una gran ayuda, una enorme aclaración, conocer su definición exacta.
Yuda, Japón, 1857. Tsuru es la hija menor de un médico. En un país en que las mujeres están sometidas a los hombres hasta en lo más mínimo, podría decirse que, en cierto modo, es una privilegiada, porque al lado de su padre ha aprendido la labor de médico y ayudándole cada día que pasa aprende más, pero nunca podrá estudiar medicina como un hombre, ni caminar al lado de uno si no unos pasos por detrás, ni será preguntada por su opinión en las cosas realmente importantes.
Japón está en un momento de cambio y la vida lleva a Tsuru a donde nunca había imaginado; en una existencia llena de luces y sombras se verá arrastrada por los acontecimientos políticos, sociales y bélicos, las intrigas políticas, los amores prohibidos, el campo de batalla… Nada será como había imaginado ni es lo que su condición de mujer en aquel país y lugar hacía preveer. Y de su mano vamos descubriendo el cambio de un país, el nacimiento del moderno Japón.
Tsuru, la protagonista, es la narradora de la historia aunque hay unos pocos capítulos salteados que tienen un narrador ajeno a la trama. De su mano vamos conociendo la historia de esos apasionantes y peligrosos años en Japón, pero también su propia historia íntima y personal, ambas íntimamente entrelazadas, abocadas a ser, en algunos momentos, una sola. Y así nos vamos intrigando con ambas, descubriéndolas y descubriendo también una cultura milenaria y tan diferente a la nuestra que todo puede resulta ajeno, aunque hay sentimientos que son universales.
Por el camino encontramos intriga política, luchas de poderes, amores prohibidos, aventura, acción, un mundo en cambio… Una novela muy recomendable.
Publicada en España por Suma de letras y consta de 523 páginas. Su precio es de 21 euros en formato libro y de 11,95 euros en formato e-book.
Yo tengo ganas de leerlo desde que salió en las novedades y por lo que cuentas me quedo con más ganas aún
un beso!
Tatty, está muy bien, ya digo que al principio cuesta hacerse con todos los personajes y nombres, pero la guía que viene al inicio ayuda mucho y luego ya no puedes dejarlo hasta el final.
Besos.
Dedse que lo vi tuve ganas de leerlo porque generalmente me llaman mucho la atención las historias ambientadas en oriente, pero tengo una lista tan grande de pendientes que lo he ido dejando. Ahora me han vuelto a entrar ganas de tenerlo así que quizá lo suba unos cuantos puestos de mi lista. Besos
Ay, es que a ti te pasa como a mi, la lista de pendientes es tan enorme que algunos parece que no les llega nunca el turno. Está muy bien, si le subes unos puestos, creo que no te vas a arrepentir.
Besos.
Está en mi lista de pendientes una lista que como siempre es enorme. De todas maneras a ver si esta semana o la que viene me paso por la librería, si está me lo pillo. A ver si me gusta tanto como a ti.
Ya estaré atenta de leer tu crítica, espero que lo disfrutes como yo.
Besos.
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