Íntimos enemigos, de Olga Salar

“ Íntimos enemigos ” es la primera novela de esta nueva serie publicada por Olga Salar (ya está a la venta una segunda novela protagonizada por algunos secundarios de ésta). Es una historia actual y agradable de leer, pero por alguna razón no he terminado de disfrutar de ella. Sus personajes no han terminado de convencerme, los veo revestidos de una pátina de irrealidad que me ha hecho imposible creerme la novela. Y no es que no esté entretenida, que lo está, ni que no sea bonita, porque si lo es, pero los he sentido tan artificiales que me ha sido imposible meterme en la novela y sentir que todo es real, como suele ocurrirme a menudo. No sé si le ha pasado a alguien más y es problema de la autora o es algo que tenga que ver más con un sentimiento mío que con la novela en si, pero ha sido ese punto que me ha impedido disfrutar de ella realmente.

Ariadna y Mónica son amigas desde siempre y siempre quiere decir desde que nacieron, porque sus padres además de ser socios en el mismo importante grupo de comunicación, Von, también son grandes amigos. Daniel, el hermano mayor de Mónica, ha sido el amor platónico de Ariadna durante la niñez y la adolescencia, aunque él siempre la ha visto como la fastidiosa amiga de su hermana menor. Sin embargo, en un viaje a Roma, algo ocurre entre ellos que los separa durante años.

Ariadna, ahora una mujer adulta, regresa a Madrid tras varios años de vivir en el extranjero para hacerse cargo de una revista femenina del Grupo Von. Es una prueba para competir con Daniel por un importante puesto directivo en el Grupo. Éste defenderá su valía desde el puesto de director en una revista para novias.

Ariadna y Daniel fueron una vez amigos, durante un instante algo más y ahora pueden llegar a convertirse en férreos enemigos. O, tal vez, el destino les depare otra cosa.

Bien, para entrar un poco más en el por qué no he terminado de creerme los personajes os diré que son tan perfectos que son irreales. Todos tenemos virtudes y defectos, hay personas blancas y puras  y personas negras como un tizón pero la mayor parte simplemente están formados por claroscuros. Los personajes de la novela, excepto uno, son perfectos: guapos, amables, honrados, trabajadores, sexys, atractivos, bondadosos, etc… sin diría yo un solo pero. Y además tienen el riñón bien forrado. Todos, toditos, todos. Y claro, la vida no es así. No es que quiera y disfrute con personajes de alma negra, pero hombre, un algo que los haga mínimamente humanos es la diferencia entre creérmelos o no, y a estos por desgracia no me los he creído.

Esto unido al hecho de que todo sea tremendamente previsible, no me han dejado disfrutar de una novela que por otro lado no deja de ser agradable y amena, en alguna contada ocasión incluso divertida. Seguramente si leyera menos y/o tuviera 20 años menos, me habría parecido una novela fresca y encantadora pero tengo 36 años y mucha lectura a las espaldas, y se me ha quedado muy corta aunque, lo repito, si que me parece una lectura amena y agradable, que visto algunos bodrios que he leído en los últimos tiempos, ya es para destacar muy positivamente.

Otra cosa que no me ha gustado y que podría pasar por alto si la novela no estuviese centrada en una trama romántica es que de las tres parejas de la novela (la protagonista que forman Ariadna y Daniel, la secundaria que tiene a Mónica en su lado femenino y la terciaria o de regalo que es la de los padres de Ariadna) en ninguno de los casos se ve o vislumbra siquiera cómo se enamoran. Algo que destacaba yo hace no mucho en la crítica de una novela de Noelia Amarillo y es que el lector disfrutaba de cómo los personajes se iban enamorando, aquí es todo lo contrario, en ningún momento se ve. Los personajes YA están enamorados, digan lo que digan. Ocurrió antes de que comenzase la novela y cuando se refiere a ello se zanja con un “siempre supe que te quería” o un “te he querido desde siempre”, aunque sea dicho con otras palabras. Es una pena, una verdadera pena, porque lo principal de esta novela es la relación entre Ariadna y Daniel. Y después de esto lo que interesa es la vida amorosa (o la falta de ella) de Mónica. Y en ambos casos se toma el camino fácil y se sale por la tangente cuando lo bonito sería ver de qué manera se llega al amor que ambas sienten (bueno, y ambos partenaire sienten por ellas). Ya que la novela se vende cómo romántica, para mi sería imprescindible, si no siendo como es yo no calificaría la novela de romántica, simplemente de novela actual, juvenil y urbana, chic y entretenida. Que no es poca cosa, ni cosa menor,  pero no es la cosa que nos venden.

Dicho lo cuál, si no sois tan puntillosos como yo y os apetece leer algo entretenidillo sin mayores pretensiones, posiblemente lo disfrutéis.

La novela está publicada por Versátil, consta de 304 páginas y su precio es de 15,90 euros.