Con el frío ya va apeteciendo un caldito bien rico y sano para entonar el cuerpo y hasta el espíritu. Cuando llegan estas fechas oigo y leo a mucha gente quejarse de que el saldo les queda insípido a pesar de utilizar buenos productos para elaborarlo. Preparar un caldo sólo tiene dos secretos que hay que respetar para que quede sabroso: no poner sal hasta el final y poner al fuego los ingredientes en agua fría (del tiempo). La razón es que así todo el sabor, los minerales, vitaminas hidrosolubles, etc… pasan al agua. En cambio, si le ponemos sal y los cocemos en agua caliente las verduras conservan casi todo el sabor y los nutrientes y el caldo queda falto de sabor y de nutrientes.
El caldo vegetal, de ave, carne, etc… cuanto más tiempo se cuece más gustoso queda. En cambio, el caldo de pescado queda gomoso si se cocina demasiado.
Aquí os dejo la receta del caldo de huesos de ternera que preparo, es muy suavecito y muy rico.
Ingredientes:
400gm de huesos blancos de ternera
1 zanahoria grande
1 cebolla blanca
2 tomates maduros
2 dientes de ajo
Preparación:
Poner en una cazuela los huesos, la zanahoria pelada y sin sus puntas, la cebolla pelada, los tomates bien lavados y los dientes de ajo lavados y con su piel. Cubrir con 4 litros de agua fría y cocinar, tapado, por espacio de 3 horas.
Colar a otra cazuela aplastando bien los vegetales para que suelten todo su jugo y dejar enfriar. Introducir en la nevera varias horas para que la grasa que contenga suba a la superficie formando una capa sólida. Colar entonces para desgrasarlo completamente.
Ya está listo para consumirlo sólo, preparar sopas o utilizarlo como ingrediente de otras recetas.
Notas dieta Weight Watchers (dieta WW o dieta de los puntos):
El caldo bien desgrasado son 0 puntos, aunque muchas veces se puntúa como 0,5 puntos por si se ha “escapado” algo de grasa.
Ñam, ñam… ¡un caldito limpio!
Es curioso lo diferente que lo hace cada cual en su casa, ¿verdad? Pero a mí siempre me resultan ricos. Ayyyy, que llega la hora de tener caldos cada día.
Esto sí apetece realmente hoy.
Besitos
Si, en cada casa se hacen diferentes, yo le varío los ingredientes, si los tomates están caros o insípidos los cambio por puerro , unas veces le pongo apio, otras un cuarto de col blanca…
¡Con este frío que tenemos, entra de miedo! Hoy de máxima tenemos 3,5ºC!!
Besitos.
Yo incluso lo he llegado a congelar, reduciéndolo mucho mucho, dejando que se quede casi sin agua y metiéndolo en la cubitera para hacer cubitos de caldo que utilizo en vez de avecrem.
¡Qué gusto verte de nuevo, Pablo! Si, yo también lo he hecho alguna vez. Cuando hago preparo una olla grande y meto también botes al arcón congelador, sin llenar hasta arriba porque luego aumenta de volumen al congelar. Es muy cómodo porque los puedes descongelar al baño maría si vas con prisa y tienes caldo casero siempre a mano.
La verdad es que no tiene nada que ver con los caldos precocinados.
El tomar una taza de consome calentito al llegar a la noche a casa es un auténtico placer, y si lo haces en la olla express en media hora lo tienes.
Eso si, de cada vez sale distinto según lo que tenga por casa (XDD) le suelo echar puerro y apio y a veces nabo, pero depende de lo que tenga.
Un abrazo Marhya!! (Me voy a comprar para hacerme un caldito.. jeje)
¡Tú si que sabes, Pablo!!
Un abrazo.
[…] Caldo de ternera […]
No sabía lo de la sal. ¡¡¡Me lo apunto!!!
Besotes.
Muchas gracias, voy a probarlo porque te confieso que aunque presumo de ser buena cocinera, todos mis caldos me salen insípidos, como si fueran agua con sal. Además ahora apetece los calditos. bss
Polita, ahora cuando pruebes ya me contarás si ves la diferencia.
Besos, guapa.
Sandra, prueba y no le pongas la sal hasta el final y parte de agua fría. Ya me contarás, espero que te guste como a nosotros.
Besos.
😉