Mis últimos fiascos lectores

No sé si estoy en un momento lector extraño o es que he tenido mala suerte con mis elecciones pero mis últimas lecturas podrían resumirse como últimos fiascos. La verdad es que arriesgué, y no tuve acierto en ello. A pesar de algunos de estos libros tenían buenas críticas a mi me han decepcionado.

Últimos fiascos lectores.

Dulce como la miel, de Susan Wiggs.

Quizá en parte se deba a que es la segunda novela de una serie y no leí la primera, aunque en teoría podía seguirse de modo independiente. Quizá tenga que ver con que la leí a trompicones, pero lo cierto es que no le atrapó lo necesario como para leerla del tirón y según iba avanzando en su lectura me iba dando más pereza continuarla.
Sea lo que sea, lo cierto es que no me ha gustado esta novela que tan buenas críticas tenía. La historia romántica que en teoría debería ocupara la parte principal de la trama queda deslavazada, y no termino de descubrir cuándo se enamoran los protagonistas o por qué más allá de porque se tienen cerca y se sienten atraídos físicamente.
La parte en teoría menos relevante de la trama es el pasado del abuelo de la protagonista en la resistencia danesa durante la 2ª Guerra Mundial. Podría decirse que es la parte más interesante y, para mi, se come a las demas tramas. Pero así y todo no termina de convencerme. Puede que por la forma de narrarlo o porque solo se mencionan o bien pasajes épicos (más o menos) o bien pasajes nefandos.
De todos modos esta parte en este momento concreto de la historia también me sobrepasa, porque sigo sin comprender cómo los que tantos sufrieron y sus descendientes directos pueden al mismo tiempo ser víctimas de un horror y causantes de otro, quizá menos desalmado o quizá menos conocido, no sé, pero igualmente un horror. Y eso a nivel humano me disgusta demasiado.

Casi perfecto, de Susan Mallery.

Tampoco me ha gustado mucho esta novelita que apuntaba interesante en la trama pero que en el desarrollo me sacó de quicio varias veces. Sobre todo por el arcaico protagonista cuya forma de ser me cabreó tanto que aunque se trate de un harlequin corto estuve por cortar su lectura más de una vez.
Uno de mis últimos fiascos en lo que a lecturas se refiere y que, la verdad, me deja hasta sin ganas de escribir sobre ello. Incoherencias sobre incoherencias y una pareja protagonista sin química ni interés alguno.
No creo que vuelva a leer nada de esta autora porque no me ha convencido en absoluto.

Estos han sido mis últimos fiascos lectores. Espero en las próximas semanas tener más acierto con mis lecturas. ¿Qué tal las tuyas?