La pequeña tienda de los corazones felices, de Ali Macnamara, es una novela feel good, romántica y con toques de magia muy fácil de leer. Una historia sencilla y una lectura agradable, que transcurre en un pueblecito turístico de la costa de Cornualles.
La pequeña tienda de los corazones felices: de qué va
Cornualles, en la actualidad. Kate es una madre soltera de una hija adolescente que por fin está feliz con su vida. Después de unos malos momentos, lleva meses asentada en St. Felix, un bucólico pueblo marinero que se ha convertido en un agradable destino turístico al que acuden personas de todo tipo, entre ellas muchos artistas. Allí regenta una tienda de manualidades y objetos de arte donde, entre otros productos, expone sus creaciones y las de otras mujeres de la zona.
Pero una noticia la llena de inquietud. Al parecer van a abrir muy cerca una tienda dedicada a la venta de productos artísticos. De pronto, el miedo vuelve. ¿Y si no hay suficiente mercado para ambas, especialmente durante los solitarios meses de invierno? ¿Qué hará si su proyecto de vida tiene un revés y debe volver a cambiar de vida?
Pero lo que parece una dificultad añadida en su camino, quizá sea una oportunidad para una vida nueva, aún más feliz y más plena. Y también puede convertirse en una oportunidad de ser felices para otras personas, como Jack y Julian, dos hombres muy diferentes que se van a cruzar en su camino.
Mi opinión sobre el besteseller de Ali Macnamara ambientado en Cornualles
Si buscas un novelón, La pequeña tienda de los corazones felices no es novela para ti. Si necesitas tener sorpresas y giros de la trama constantes, tampoco. Pero si solo buscas una lectura sencilla que te deje buen sabor de boca y esté llena de buenos sentimientos, probablemente te gustará.
Si de algo peca La pequeña tienda de los corazones felices es de ser extremadamente previsible. En prácticamente todas sus líneas argumentales. Eso es lo que menos me ha gustado de una novela que si tendría que calificar con una sola palabra sería “bonita”. Alguna sorpresilla habría estado bien.
Es verdad que es muy simple. Y que el toque mágico tan directo no le gustará a todo el mundo. Pero lo cierto es que es tan agradable que me ha gustado.
Me parece una lectura ideal para esas épocas en que tienes la mente tan agotada de trabajo intelectual que solo puedes abordar por ocio lecturas ligeras, livianas y fáciles. También para quien tenga poco tiempo de leer y no esté dispuesto a abordar a trompicones y ratitos una novela densa o adictiva.
Lo cierto es que sin ser nada de especial, es una novela que se lee con gusto, una historia bonita y una lectura que deja el corazón calentito. Y en ocasiones no necesito más. Ahora tú decides si es bastante para ti o estás buscando algo diferente. Si crees que puede gustarte, te animo a que le des la oportunidad.