Hace unos días te contaba las series que quería completar este año. Hoy, las novelas que quiero leer en 2018. Que no son pocas. Y que no sé si podré leer. Porque como nos pasa a casi todos los lectores compulsivos, siempre hay novelas que añadir a la lista de pendientes por cada una que logramos tachar por leída.
Las eternas novelas pendientes.
Por alguna razón que no sé explicar, hay una serie de novelas que todos los años me propongo leer y todavía no he leído. Se van quedando siempre atrás en la lista, eternas lecturas pendientes. Como Guerra y paz, siempre entre las novelas que quiero leer y todavía no he tenido ni la decencia de comprarla. O como Viento del este, viento del oeste, que me han recomendado fervientemente en muchas ocasiones personas con las que sé que comparto gustos literarios, pero que ahí va quedando para otro día, otro mes, otro año.
También llevo varios años queriendo leer varias novelas de Anne Rice de dos series diferentes. Las tengo en casa, muy monas cogiendo polvo en una balda. Y nada, que entre unas cosas y otras no he encontrado el momento de comenzarlas. Y eso que son novelas que quiero leer, pero siempre hay una lectura más apetecible que anteponer a ellas.
Tengo también pendientes de leer unas novelas de Paul Auster que me regalaron hace tiempo. Nunca parece llegar el momento para ellas. Siempre van quedando atrás en la lista. Muy por detrás de las anteriores. Tanto es así que ya dudo yo misma si de verdad un día les llegará el momento.
Las novelas pendientes del año pasado.
El año pasado hubo alguna novela que tenía pensado leer y que al final tuve que dajar aparcadas por uno u otro motivo. Son las primeras novelas que quiero leer en 2018. A ver si lo consigo.
Una de ellas fue El vagón de las mujeres. Lo comencé en una época de mucho trabajo y los extraños nombres hindús lograron que me armase un taco en la cabeza. Así que decidí dejarla a un lado para una época del año más relajada. Espero en las próximas vacaciones poder leerlo al fin, porque el caso es que me estaba gustando.
También dejé pendientes algunas novelas negras porque no quería sobre saturarme con el género, del que leí por suerte algunas buenas novelas el año pasado. Seguramente en estos primeros meses del 2018 pueda leerlos.
Las que se me han antojado y las que se me antojarán.
Como buena lectora compulsiva, tengo siempre a mano boli y papel para añadir nuevos antojos lectores a mi lista de novelas pendientes. Una lista que mucho me temo que necesitaría varias vidas para poder leer en realidad. Imposible empezar a desgranar títulos y autores. Además de las series empezadas que, como comenté hace unos días, me muero de ganas de completar.
Los antojos que he tenido y los que tendré son las novelas que quiero leer. Pero cuáles al fin podrá caer… eso ya es otro tema.
Y tú, ¿qué novelas quieres leer en 2018?
Me gusta la idea de crearse una lista de lecturas para el año. Tal vez así conseguiría leer algo más regularmente que lo que he hecho en años anteriores.
Pero si viento del esto, viente de oeste merece estar en la parta alta de tu lista :o)
Besos y feliz fin de semana,
Palmira
Con ese ánimo lo hago, Palmira, pero no sé yo si lo conseguiré. Me apunto el voto de más por “Viento del este, viento del oeste”.
Besos.
Marhya yo no soy de las que haga una lista de lecturas pendientes, aunque sí las tenga en mente, sino que voy leyendo según puedo. En lo que sí estoy de acuerdo es que por mucho que leo siempre van surgiendo nuevas recomendaciones o salen nuevos libros que me interesan. En fin que no da una abasto.
Besos.
Es inevitable, creo que nos pasa a todos los que nos gusta mucho leer.
Un beso, feliz semana.