Un viaje entre dos luces, de Nick Alexander, es una de mis últimas lecturas. Es una novela entretenida pero de la que esperaba mucho más. Al principio despertó mi interés pero enseguida se vuelve previsible en lo esencial. Lo más importante que te imaginas que va a suceder, sucede. Eso unido a que es una narración de hechos a dos voces y en dos épocas diferentes que no termina de profundizar en la relación entre las dos protagonistas, hace que no sea lo que yo recomendaría como lectura para disfrutar al máximo.
Laura y Becky son madre e hija y nunca han tenido una relación muy estrecha, aunque tampoco se puede decir que se lleven mal. Becky, en parte, está resentida porque Laura nunca quiere hablar del pasado. Ella querría saber cosas de su padre, pero el tema siempre parece inoportuno y altera la convivencia, así que con los años ha dejado de insistir sobre ello, aunque la curiosidad sobre sus orígenes no ha menguado.
El regreso de Becky a la casa familiar tras su paso por la universidad puede suponer un cambio en su relación, no se saber si para bien o para mal. Laura le sorprende con un viaje a Grecia para celebrar allí su 50 cumpleaños. Quizá sea la oportunidad que ambas necesitan para mejorar su relación.
La historia prometía y yo esperaba que se centrara, sobre todo, en la relación de madre e hija. Pero la realidad es que esto queda bastante aguado, no profundiza nada en ello, y me parece una verdadera lástima, porque creo que tenía un filón en las manos y que tal y como se presenta la sinopsis es lo que el lector se espera. A cambio peca de narrar sin profundizar, cuenta y cuenta pero no termina llegando a nada salvo a contar unos hechos determinados.
Que es previsible, ya lo he dicho. Y que el final se ve de lejos y aún así parece metido con calzador, pues también. Imagino que gustará mucho a quienes lean poco, pero creo que un lector exigente no se conformará con eso. Se podría haber llegado a un final similar pero no por un camino tan fácil. Hubiera sido ideal una primera parte de la novela tal cual está y una segunda para resolver ese punto que no quiero mencionar para no hacer spoiler, pero que podría haber servido además para desarrollar más la compleja relación madre e hija protagonistas.
Dicho todo esto, no entiendo el por qué de éxito de ventas de este autor. O quizá sea justamente por esto, porque es fácil de leer y cualquiera que no lea demasiado puede leer Un viaje entre dos luces fácilmente, y quizá hasta sorprenderse con la trama, vete a saber. No digo que no sea entretenidillo, que lo es. Pero se queda ahí y esperaba mucho más, así que en ese sentido he quedado decepcionada. Quizá si ya lo hubiese empezado sabiendo qué esperar lo habría disfrutado más.