¡Huye, Jane, huye!, de Joy Fielding, es una novela de intriga o domestic noir que me ha gustado mucho. Publicada por primera vez en 1991, en 2019 volvió a publicarse en España y me alegro porque no sé si de otro modo la hubiera descubierto.
Al estar escrita (y ambientada) antes de la era de los móviles y la tecnología accesible en un bolsillo, la trama es apasionante. Situaciones cotidianas no se resuelven echando un vistazo a internet, a redes sociales. Nadie lleva un teléfono en el bolsillo que le comunique con otros o le permita pedir ayuda. Y eso es un plus.
Quizá para las personas más jóvenes sea como leer un thriller histórico, no lo sé. Pero para los que como yo hemos sido adolescentes sin móviles, es totalmente comprensible. E incrementa la sensación de soledad y de sentirse perdida de la protagonista.
De qué va ¡Huye, Jane, huye!
Boston, 1990. Un día de principios de verano una mujer se encuentra en mitad de la ciudad sin saber quién es. No recuerda su nombre. No sabe nada de su pasado. No sabe si tiene familia, quiénes son sus amigos, qué le gusta, ni dónde vive. Pero se da cuenta de que conoce la ciudad, las calles. De que sabe muchas cosas en realidad, desde sumar a nombres de libros, no es que haya olvidado todo.
Sabe que ha salido a comprar huevos y leche para preparar una tarta, tiene la lista de la compra en el bolsillo de la gabardina. Poco a poco va descubriendo cosas que le asustan: su vestido empapado de sangre, la inmensa cantidad de dinero que guarda en los bolsillos. Sin saber qué hacer, deambula por las calles de Boston sin atreverse a ir a la policía. ¿Y si es una ladrona o una asesina? ¿Y si la buscan por algún delito?
Se siente totalmente perdida. Y cuando al fin pide ayuda, descubre que está casada con un apuesto desconocido. ¿Pero qué sabe de él en realidad si ni siquiera sabe nada de sí misma? Vulnerable y asustada, los susurros sobre depresión, la muerte de su madre o la de su hija, a quienes no recuerda, la sumen en un estado de apatía, adormecimiento y miedo.
Aunque quizá haya algo más. Porque no puede desprenderse de la sensación de que algo terrible ocurre. ¿O lo terrible es su amnesia, esa pérdida de memoria que la deja indefensa ante su propia persona?
Mi opinión sobre esta intrigante novela de Joy Fielding
He disfrutado mucho leyendo ¡Huye, Jane, huye!, y sumiéndome en la intriga de la trama. Me ha gustado mucho que el lector vaya en conocimiento sobre lo que sucede a la par con la protagonista. Nunca sabe más que ella, aunque puede intuir más porque no está sumido en su estado de confusión y adormecimiento. La acompañas con sus interrogantes y dudas porque también serán los tuyos.
Aunque en algunos momentos pueda llegarse a intuir alguna cuestión, el grueso de la trama y los porqués no se adivinan. Así que una puede seguir leyendo con avidez y sorprenderse por lo que va ocurriendo.
Y la revelación es impactante. La resolución es satisfactoria. Todo tiene sentido, nada queda sin respuesta. Algo que para mi es clave para valorar positivamente una novela negra o una historia de intriga.
Este tipo de novelas de intriga psicológica y real, en las que no se cae en abusar de la acción ni del morbo, en la que no se usa el recurso de lo sangriento y desagradable en cada giro de la trama, me gustan mucho.
Lógicamente no se puede contar mucho más sobre ¡Huye, Jane, huye! De lo contrario, se corre el peligro de desvelar demasiado sobre su trama. Si te gusta sentirte intrigado y sorprenderte, si buscas una lectura adictiva, si empatizar con el personaje protagonista es un plus para ti, creo que te va a gustar. A mi me ha encantado.
