Salto al vacío, de Melinda Leigh, es la tercera entrega de una serie de novelas de intriga que me está gustando mucho: Bree Taggert. Espero que continúen publicando las siguientes al mismo ritmo, aunque me escama que en la introducción mencionen el fin de una trilogía, ya que no lo es y la autora tiene publicadas en total seis novelas de esta serie que comienza con Promesa de sangre.
De qué va Salto al vacío, de Melinda Leigh
Norte del Estado de Nueva York. Una llamada alerta a la oficina de la Sheriff del condado sobre un coche que lleva varios días abandonado cerca de un puente, en una zona rural poco transitada. La propia sheriff Bree Taggert decide acudir por si alguien estuviera herido en las inmediaciones o se hubiera perdido, ya que las bajas temperaturas de los últimos días no son fáciles de soportar a la intemperie. Cuando llega al lugar, encuentra que el coche no está cerrado con llave y que su propietaria ha dejado el móvil y el bolso en el mismo, lo que no apunta a nada bueno.
Tras una llamada para recibir apoyo y tras una primera inspección ocular, sus nefastas previsiones se confirman: un cuerpo flota junto a la orilla. Posiblemente la joven fallecida se ha suicidado tirándose del puente. Pero la autopsia revela que ya estaba muerta antes de caer al agua.
Ahora, Bree junto a su quipo y su colaborador externo Matt Flynn debe averiguar quién lo hizo. Claro que todo no va a ser tan fácil porque los indicios que empiezan a aparecer apuntan a demasiados posibles sospechosos. Su marido, su hermana, su jefe, la ex esposa de este, una compañera de trabajo obsesionada con ella, son solo algunos de ellos. Eso, sin contar con la posibilidad de que haya sido un desconocido que no tuviera ninguna relación en particular previa con la víctima.
Mi opinión sobre Bree Taggert nº3
Salto al vacío me ha gustado mucho, tanto en la parte de intriga como en la trama personal que va uniendo las distintas novelas de la serie.
En este caso me ha ocurrido algo curioso. No sé por qué, en los primeros capítulos tuve una intuición o vislumbré algo muy relevante sobre la resolución del caso, que luego descarté a medida que avanzaba la investigación y que, finalmente, fue cierto. No en la totalidad de la resolución: quién, por qué y cómo. Solo sobre una de estas tres cuestiones en parte y relacionado con otra también en parte. El caso es que no puedo decir que sea previsible porque yo misma descarté posteriormente esa primera posibilidad que creí ver. Y porque leyendo otras reseñas de la autora no veo que nadie más lo señale.
Supongo que después de tantos años de lecturas, películas y series siempre algo nuevo se puede relacionar con algo antiguo que nos haga pensar en una posible resolución y que termine siendo cierto. Imagino que eso es lo que ha ocurrido, que en algún momento alguna frase o escena (creo que tengo clara cuál porque es donde sospeché sobre esa cuestión concreta) me recordó a otra, no sabría decir de qué novela o película.
Lo bueno es que luego la di por descartada porque aparecían otros indicios, otras sospechas, otras posibilidades que veía como más factibles. Además, solo era un acierto o intuición parcial, el resto de la resolución me ha sorprendido. Así que no me he quedado con la idea de que Salto al vacío sea una novela de intriga con un final previsible, ni mucho menos.
He disfrutado metiéndome en la intriga. Pero también en la parte personal (la romántica y la familiar) que está tan perfectamente integrada en la trama que en ningún momento rompe el ritmo o el interés por lo que a la trama principal de suspense se refiere.
Recomiendo Salto al vacío a todo el que esté disfrutando de la serie Bree Taggert y espero que no tarden en publicar en castellano la cuarta novela de la serie.