Tal como somos, de Nicholas Sparks

Tal como somos, de Nicholas Sparks, ha sido mi última lectura. Es una novela que tenía pendiente leer hace meses, aunque no sabía si “atreverme” o no debido a mi relación de amor/odio con las novelas de este autor; unas me encantan y otras las he terminado con una mala leche tremenda. Afortunadamente, ya puedo decir que Tal como somos pertenece al primer grupo.

Una noche de tormenta, María Sánchez está al borde de una carretera con la rueda de su coche pinchada. Un tipo extraño para a ayudarla, aunque lo que logra en primer término es asustarla. Y es que tiene una pinta que da miedo; joven, fuerte y con la cara llena de magulladuras, como si hubiera participado en una palea o le hubiesen dado una paliza. Pero el tipo de comporta con educación y la ayuda.

Colin es el chico que ha ayudado a María. Como ella, tiene 28 años, aunque hasta ahí podrían contarse las similitudes entre uno y otro. Él ha nacido en el seno de una familia acomodada, pero ha llevado una vida extraña, ha sufrido graves problemas de conducta y gestión de la violencia en el pasado, ha estado a punto de ir a la cárcel y no tiene relación alguna con su familia. Trabaja como camarero en un local cerca de la playa, estudia Magisterio en la universidad y acaba de combatir en una pelea ameteur de algo parecido a las artes marciales mixtas. María es la hija mayor de una pareja de emigrantes mexicanos que regentan un restaurante, aunque nunca ha vivido con lujos no la ha faltado lo esencial ni el amor de una gran familia, ha estudiado derecho y tiene un buen trabajo en un buffete de prestigio.

Ni María ni Colin pueden imaginar que volverán a verse tras ese primer encuentro fortuito y breve. Pero lo hacen. Y aunque son muy diferentes, pronto se enamoran. Pero no todo va tan bien como debería en el inicio de esta relación, porque pronto aparecen los nubarrones en forma del pasado de María, que amenazan con llenar de peligro e incertidumbre su futuro más cercano.

Como en muchas novelas de Nicholas Sparks, poco puede contarse de la misma porque lo principal son los personajes, su forma de ser y su relación. Y eso hay que ir descubriéndolo página a página. Pero me ha gustado. Igual que me ha gustado que sea un poco menos previsible tanto en la creación de los mismos como en otros aspectos de la novela.

La parte de la trama que tiene que ver con el pasado de María que vuelve al presente, me ha tenido en vilo. Debo decir que mis prejuicios para con ciertas mañas del autor no me han dejado disfrutarlo del todo, pues por ratos tenía la impresión de que la trama iba a tomar derroteros que no me gustaban nada, sobre todo llegando al final. Pero esta vez Nicholas Sparks se ha portado y no ha usado el calzador para forzar las cosas.

Aunque no hay un gran elenco de personajes secundarios, merece la pena destacar a los pocos que pueblan la novela: Evan, Serena, Lily, el policía Margolis y los padres de María. Especialmente quiero destacar a Evan, que es un personaje que quizá destaque menos que otros en principio, pero que es vital en la vida de Colin. Entre otros con aparentemente más personalidad, como su novia Lily, podemos tender a infravalorar su labor y su forma de ser. Sin él probablemente Colin no estaría en el punto en el que está tan alejado de lo que fue su adolescencia y primera juventud.

No voy a contar más, pues creo que merece la pena descubrir la novela desde el principio sin saber mucho de la misma. Solamente voy a añadir que mientras Nicholas Sparks siga este camino, seguiré leyendo sus novelas.