La ensalada de patata y remolacha que traigo hoy es muy saciante pero no resulta pesada. Lleva pocos ingredientes y casi todos son “de despensa”, así que es perfecta para cuando vuelves de viaje y no tienes nada o casi nada fresco a lo que echar mano o para cuando no has podido ir de compras en unos días y tienes la nevera temblando.
Es muy fácil. es muy rica. Y es muy económica. Razones de peso para animarte a probarla y disfrutarla en tus menús familiares. Además la puedes servir de plato único.
Ensalada de patata y remolacha
Ingredientes:
1/2Kg de patatas pequeñas
250gm remolachas cocidas
125gm de surimi rallado
2 latitas de atún en aceite de oliva
mayonesa (al gusto)
cebollino fresco
sal
Preparación:
Lavar las patatas y ponerlas a cocer en una cazuela con abundante agua caliente y un pellizco de sal. Cuando rompan a hervir contar unos 25 minutos (el tiempo dependerá del tamaño y variedad de las patatas; se puede comprobar pinchando con una varilla para brochetas y cuando no ofrezca resistencia está listo).
Dejar enfriar las patatas primero en la cazuela con el agua y después a temperatura ambiente (en verano en la nevera) para que no se rompan.
Pelar la patatas ya frías y cortarlas en dados. Ponerlas en una fuente con la remolacha también peladas y cortada en dados. Sazonar ligeramente.
Añadir el surimi rallado y el atún bien escurrido de su aceite de conservación a la ensalada. Incorpora unas cucharadas de mayonesa (la cantidad, al gusto) y mezcla bien.
Reparte en cuencos individuales de servicio.
Lava el cebollino, pícalo fino y espolvorea sobre las ensaladas. Servir.
Esa mezcla de patatas y remolacha me recuerda a mi infancia, cuando la huerta de Noja aún producía.
Menudas remolachas más ricas sacábamos de ahí…
Ainsss, qué buenos recuerdos.
Besotes.
Me encantan estas recetas de andar por casa sin complicarse y además siendo ensalada ni te cuento.
Besines
Es que como las remolachas de casa… El año pasado tuvimos de la huerta, éste no, y no hay manera de encontrarlas crudas, al final tengo que recurrir a las cocidas al vacío, que no están malas, pero no es lo mismo.
Besos.
Me alegro un montón de que te guste, Bertha.
Besos, guapa.
Qué raro, verdad?
Si, será que no gustan a la gente o no hay costumbre, no lo sé, pero contadas veces las he encontrado crudas en frutería por aquí.