Una librería en la playa, de Brenda Novak, ha sido una de mis últimas lecturas. Es un libro que estaba disfrutando mucho pero el final ha sido tan brusco que me ha dejado una sensación agridulce. No parece que sea parte de una serie o al menos no lo indica por ningún lado, por lo que no se entiende que el final se cierre de forma tan veloz sin ahondar más y sin al menos un epílogo un tiempo después que deje claro qué ha sido de los personajes y tramas principales.
La sensación es de que han cortado por lo sano porque se alargaba más de lo que la editorial o la editora consideraban adecuado, han adelantado el esperado final feliz que requiere una novela de este tipo y han dejado el resto en el aire. Y encontrarte con esto cuando una novela está gustando es bastante triste.
Por cierto que aprovecho para decir algo que parece estar de moda en el cine y la literatura: los finales inacabados. No abiertos, no: inacabados. Que son dos cuestiones diferentes.
De qué va Una librería en la playa
Sable Beach, Virginia. Mary Langford tiene ciencuentaytantos años, una hija, dos nietos, una librería en la playa a medias desde hace muchos años con Laurent y muchos secretos del pasado que solo su socia y unas pocas personas más conocen y que la hacen vivir con muchos miedos. Esos miedos la impiden viajar. Por eso, aunque hubiera querido estar junto a su hija y nietos más a menudo en los últimos meses ha tenido que esperar a la llegada del verano para que sean ellos quienes acudan a su casa.
Autumn Divac es una treintañera con un hijo de 16 y una hija de 17 años. Hace año y medio que su marido ha desaparecido y no sabe si está vivo o muerto. Muchos le preguntan si se fue con otra o qué ha pasado pero ella sabe que no dejaría a sus hijos y tampoco abandonaría todo su patrimonio. Pero, ¿qué ha podido pasar? Y, sobre todo, ¿hasta cuándo seguir buscando o darse por vencida?
La llegada de Autumn y sus hijos a casa de su madre será un punto de inflexión y tal vez un respiro. Quizá sea el momento de averiguar algo sobre su padre, ya que la experiencia que está viviendo la hace sentir más la necesidad de conocerle antes de que sea imposible. Si su madre no pone de su parte, en fin, ella no quiere hacerle daño, pero necesita respuestas.
El verano no va a ser exactamente lo que ninguno de los protagonistas imaginaba.
Mi opinión sobre esta novela independiente de Brenda Novak
Como he mencionado al principio, me estaba gustando mucho Una librería en la playa, salvo alguna cosita que ahora comentaré. Y el final brusco ha sido como un jarro de agua fría que corta todo y deja en el aire tantas cosas que no tiene sentido salvo que se tratara de una serie. Espero que la autora y/o la editorial corrijan de algún modo un error demasiado grave para una autora de esta talla.
No confío mucho en ello. Además tengo otra novela suya pendiente y por un par de comentarios que he leído tengo la sensación de que adolece de lo mismo. Ojalá me equivoque. Porque de ser como apunta ya me haría descartar a una autora que me ha hecho disfrutar con muchas novelas, porque no es nada agradable interesarte por una trama y que queden tantos flecos abiertos, tantas partes inacabadas.
La otra pega que podría perdonar más fácilmente y sería una mera llamada de atención sin el problema anterior son los errores en los primeros capítulos relativos a edades o fechas. 18 meses pasan a ser dos años y vuelven a ser 18 meses en más de una ocasión, las edades no coinciden en algún momento, y eso despista y te saca por un momento de la narración. En una novela autopublicada me parece más perdonable pero en un libro de editorial de una autora consagrada se me hace difícil pasarlo por alto.
Dicho todo esto la historia me ha hecho disfrutar durante muchísimas páginas. Y quizá por eso es mayor la decepción por ese final falto de cierre de tramas y asuntos. Así que me lo voy a tomar de esta manera: inventaré el final a esas tramas que me apetezca y con ello me quedaré. Porque la relación de los personajes, los secretos y sentimientos, sobre todo, de abuela, hija y nieta, es algo sobre lo que realmente me ha gustado leer. Las dudas, los miedos, las esperanzas, los buenos y malos momentos, su evolución.
Y esto es todo lo que sin desvelar demasiado puedo decir sobre Una librería en la playa.
[…] de leer hace unos días Una librería en la playa, de la misma autora, no puedo decir que me sorprenda esto de Un verano perfecto. Pero al menos no […]