Hoy vengo con una receta de solomillos de pollo con azafrán y piquillos que está de chuparse los dedos. En realidad es muy sencilla tanto en ingredientes como en elaboración. Pero es muy rica, es sorprendente como con tan poco se logra tanto sabor.
Los solomillos del pollo no son otra cosa que el músculo de debajo de la pechuga del ave. Desde hace un tiempo se encuentra este corte que queda muy bien en muchas preparaciones y es muy tierno. Si sueles sacar tú las piezas del pollo, te resultará muy fácil hacerlo.
Los pimientos del piquillo que he usado son los típicos asados y embotados. Si no tienes, puedes asar pimientos frescos o prepararlos en sofrito. Pero de esta forma es un plato que puedes hacer un día cualquiera con poco trabajo y en poco tiempo. Por ejemplo, para la típica cena de diario en la que no tienes muchas ganas de enredar en la cocina.
Es un plato sencillo que puedes acompañar con un entrante ligero y rápido, como puede ser una ensalada de espinacas y queso castellano o una ruedas de tomate. Así tienes una cena estupenda con muy poco trabajo.
Yo le he puesto un toquecillo picante porque me encanta, pero si no te va o lo van a tomar los peques, sencillamente no añadas la guindilla y sigue igual todo lo demás.
Solomillos de pollo con azafrán y piquillos: receta
Las cantidades son para cuatro raciones de solomillos de pollo con azafrán y piquillos como las de las fotografías.
Ingredientes para preparar Solomillos de pollo con azafrán y piquillos
8 solomillos de pollo grandes o 12 pequeños
un bote (420 gramos) de pimientos del piquillo en tiras, asados
2 dientes de ajo grandes
un pellizco de hebras de azafrán
100 ml de sidra
una guindilla de cayena
aceite de oliva
pimienta negra recién molida
sal
Cómo hacer solomillos de pollo con azafrán y piquillos
Pela los ajos y pícalos.
Pon al fuego una sartén con un chorrito de aceite de oliva, la guindilla picadita y el ajo. Sofríe y cuando cojan color retíralos.
Salpimienta los solomillos de pollo y añádelos a la sartén para que cojan color por ambos lados. Con un par de minutos por cada lado es suficiente.
Añade los pimientos del piquillo y rehogar un par de minutos más a fuego vivo. Añade entonces las hebras de azafrán para que se tuesten con todo ello, con cuidado de que no se quemen.
Añade la sidra y de nuevo los ajos doraditos. Cubre con una tapa y cocina 5 minutos en un hervor suave. Da vuelta al pollo, deja destapado y cocina a fuego vivo para que se evapore el líquido quedando una textura de salsa ligera y se haga bien la carne.
Sirve los solomillos de pollo con azafrán y piquillos recién hechos y calientes y lleva al momento a la mesa.
Tiene una pinta buenísima.