La receta de agridulce de bambú con zanahoria es muy sencilla. Es una preparación que puedes servir de modos muy diferentes y que requiere poco trabajo de preparación.
Como entrante, es un plato ligero y sabroso que en pocos minutos al fuego está listo. Si los días de calor no quieres que la temperatura suba en tu cocina es una buena elección. Como acompañamiento es buena guarnición de carnes y pescados a la plancha. Pero también es estupendo para mezclar con arroz cocido o con pasta cocida para tener un plato más completo.
Hace años encontrar brotes de bambú tiernos en conserva era muy complicado. Actualmente se han popularizado y en la mayor parte de supermercados se encuentra sin problemas en la misma zona que en otros vegetales en conserva o en la zona de cocina internacional. También era complicado encontrar vinagre de arroz que a día de hoy también es sencillo. Pero si por lo que sea no tienes y es el ingrediente que te falta, usa un vinagre de manzana o un vinagre de vino blanco normal.
El aceite de sésamo da un sabor especial. Si no tienes una botella y no quieres comprar usa uno de sabor más bien neutro y añade unas semillas de sésamo a la receta justo al retirar el wok del fuego.
Yo la he servido en esta ocasión como entrante y las cantidades que doy en ingredientes son para 4 raciones como las de las fotografías. Aunque puedes preparar el agridulce de bambú con zanahoria en una sartén, si tienes wok no dudes en usarlo, a fuego vivo y removiendo la verdura hacia sus paredes queda ese punto de crujiente y a la vez cocinado tan propio de los salteados en wok que con la sartén no se consiguen.
Agridulce de bambú con zanahoria: receta ligera
Ingredientes para cuatro raciones
3 zanahorias grandes
una lata de brotes de bambú en tiras de 420 gramos
1 cucharada de aceite de sésamo
50ml vinagre de arroz
2 cucharadas colmadas de miel de azahar
1/2 cucharadita de jengibre fresco rallado
una guindilla de cayena
sal
Cómo hacer agridulce de bambú con zanahoria
Pela las zanahorias, despúntalas y córtalas en daditos.
Diluye la miel en el vinagre de arroz o mezcla lo mejor posible.
Pon al fuego un wok con el aceite de sésamo. Cuando coja calor añade las zanahorias, y saltélas a fuego vivo 2 minutos, sin dejar de mover hacia las paredes del wok. Añade entonces los brotes de bambú bien escurridos de su líquido de conservación junto con la guindilla troceada y sigue cocinando y removiendo 3-4 minutos más.
Añade entonces un pellizco de sal, la miel diluida en el vinagre de arroz, el jengibre fresco rallado y tapa el wok. Cocina todo junto también a fuego vivo 3-4 minutos y retira del fuego. Sirve enseguida.
Como apetece con éste calor.