La legumbre que se vende cocida y embotada es un buen recurso cuando quieres preparar un plato reconfortante y de cuchareo y tienes poco tiempo. Como es el caso de estos garbanzos con tomatitos y jamón de hoy, que he preparado precisamente con garbanzos cocidos en bote.
Partiendo de este fondo de despensa, con cualquier cosilla que tienes por casa apañas un plato estupendo en poco tiempo y casi sin trabajar. Yo tenía unas lonchas de jamón, tomatitos, cherry, caldo y con poco más que especias y ajo he preparado unos garbanzos como los que ves en las fotografías. Al final es atreverse a cocinar con lo que se tiene.
La verdad es que en pocos minutos coge mucho sabor, sobre todo por el caldo y las especias. Y es un plato saludable y nutritivo, que también es importante. Tener poco tiempo no tiene por qué suponer comer cualquier cosa. Si de forma habitual tienes que cocinar en pocos minutos, contar con un buen fondo de despensa y cuando tengas más tiempo, cocinar y congelar.
Claro que también puedes preparar este plato partiendo de garbanzos cocidos en casa. En una olla rápida con laurel y un casco de cebolla, por ejemplo. Puedes guardarlos en un recipiente apropiado en el congelador en raciones y luego utilizarlos para diferentes mezclas y preparaciones.
Garbanzos con tomatitos y jamón
Con estas cantidades tienes para dos raciones de garbanzos con tomatitos y jamón. Es un entrante nutritivo que puedes completar con un principal rápido, por ejemplo con unos huevos fritos o una tortilla vasca de bacalao.
Garbanzos con tomatitos y jamón: qué ingredientes necesitas
1 bote (420 gramos) de garbanzos cocidos
150 gramos de tomates cherry (en su defecto, tomate troceado o la misma cantidad de tomate triturado)
3 dientes de ajo grandes
50 gramos de jamón curado
400 ml de caldo de verduras
1/2 cucharadita de pimentón dulce
1/4 cucharadita de pimentón picante
pimienta negra
una hoja de laurel
aceite de oliva
sal
Cómo hacer garbanzos con tomatitos y jamón
Pela los ajos y lamínalos. Pica el jamón, si es en taco en daditos, si es en loncha no demasiado fino para que no se queme.
Lava y escurre los tomatitos y escurre los garbanzos cocidos tras darles un agua en caso de que sean embotados.
Pon al fuego una cazuela con un chorrito de aceite de oliva, los ajos y el jamón y rehoga todo junto unos minutos, lo justo para que los ajos cojan un poco de color dorado. Añade entonces los tomatitos y rehoga un minuto más todo junto.
Vierte en la cazuela los garbanzos y el caldo. Añade el laurel, ambos tipos de pimentón, un pellizco de sal (poco porque el jamón ya aporta sazón) y un par de golpes de pimienta negra molida. Tapa y deja que rompa a hervir. Baja entonces un poco el fuego y mantén en un hervor medio-suave unos 10 minutos, si tienes tiempo para 15, mejor aún porque los garbanzos con tomatitos y jamón tendrán un sabor más intenso.
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