El otro día os dejé con la primera mitad de mis 10 novelas que releo, más o menos, cada año (aquí) y hoy sigo con las cinco restantes. Dentro de esta segunda mitad, no están en orden, me sería complicado ponérselo y además, seguro que según el momento alguna oscilaría de un puesto a otro. También hay un par que se han quedado fuera por los pelos, quizá hubiesen entrado por los pelos otro día, pero las listas, es lo que tiene. Quizá un día la amplié con “las dos que se quedaron fuera, por poco” 😉
* Orgullo y prejuicio, de Jane Austen. A estas alturas de la vida no creo que haya quien no la conozca, incluso se me hace difícil pensar en que alguien a quien le guste leer, no la haya leído al menos una vez en la vida. Es una historia en la que me gusta sumergirme de vez en cuando. Creo que toda lectora se identifica de algún modo con Elizabeth Bennet y que casi todas en la vida real nos desesperaríamos con un Señor Darcy, pero en literatura, le adoramos.
Hay multitud de versiones para el cine y la televisión de la novela, yo al final caí presa de la curiosidad y vi la protagonizada por Keira Knightley, aunque dicen que la mejor es la mini serie de la BBC. No termino de animarme, me gusta cómo son los personajes y los escenarios en mi cabeza.
* El sueño de Joanna, de Barbara Wood: Llegué a este libro por una equivocación y es que fue un regalo frustrado, la persona para la que lo compré, ya lo tenía. Me enteré de casualidad y casi, casi, en el último minuto. No tenía el ticket de compra para descambiarlo, así que me lo quedé. Y estuvo un tiempo en una estantería envuelto en papel de regalo hasta que me animé a leerlo. Me encantó. Quizá en buena parte porque la Australia de finales del S. XIX, en la que está ambientada, me parece de lo más interesante, pero no sólo por ello. Sus personajes (y no sólo los protagonistas) a lo largo de los años, en una zona concreta del nuevo país, lo que tiene de romántico y lo que tiene de aventura, me cautivan cada vez que lo leo. Quizá no sea literatura de altísima calidad, pero a mi me encanta.
Hace un tiempo ya os hablé de esta novela Aquí.
* La flaqueza del bolchevique, de Lorenzo Silva. Es una novela corta que se lee en una tarde, y de vez en cuando me doy el gusto, aunque ni por lo que cuenta ni por cómo lo cuenta, sea de agrado para todo el mundo. Escribí aquí sobre la novela , de la versión cinematográfica protagonizada por Luis Tosar y María Valverde, no puedo contaros nada porque no la he visto. No sé deciros muy bien si es la historia de un amor, de una obsesión o de una degeneración, pero es una historia que de tanto en tanto, vuelvo a leer.
* El otro árbol de Guernica, de Luis de Castresana. Fue lectura obligada en mi primer año en el instituto y desde entonces lo he leído muchísimas veces. El autor fue un niño evacuado al extranjero durante la Guerra Civil Española y de su experiencia nació esta preciosa novela protagonizada por Santi.
Ya hablé de la novela aquí y podéis ver la película que se rodó en 1969 basada en el libro, aquí , aunque el libro es infinitamente mejor.
Aunque se hable de unos niños de hace casi 80 años y de una guerra concreta, son muchos por desgracia los conflictos que hay en el mundo y los niños que tienen que ser evacuados a lugares donde se vive en paz. Creo que a cualquier niño a partir de unos 12 años le puede gustar, y que cualquier adulto sensible se dejará atrapar por la historia que el autor nos cuenta.
* La sonrisa etrusca, de José Luis Sampedro: A finales de verano hará veinte años que leí por primera vez esta hermosísima novela. Lo recuerdo muy bien porque fue parte del regalo que mis amigas me llevaron al hospital cuando por fin pudieron ir a verme; tenía 16 años y era mi primer día en planta después de varios en la UVI. Desde entonces, lo he releído muchas veces, y siempre me provoca la misma ternura y la sonrisa en las mismas escenas.
La novela transcurre en Italia y cuenta la vida de un jubilado, Salvatore Roncone, que ha vivido siempre en el campo y enfermo de cáncer, es llevado por su hijo a Milán para que sea tratado. Salvatore no congenia mucho con su hijo ni con la mujer de éste, no entiende la vida que llevan en la ciudad. Renato trabaja en un laboratorio y su mujer que es de familia acomodada, en la universidad. Ni los jóvenes entienden al viejo, ni viceversa.
Salvatore tiene un nieto pequeño al que aún no conocía, Bruno. Ese mismo nombre (algo que su hijo desconocía cuando se lo puso al niño) es el que él tenía cuando era partisano, lo que le acerca más al pequeño y la ternura de la relación abuelo-nieto le devuelve las ganas de vivir y le abre un mundo que desconocía. Además, aparece en escena una mujer con la que vivir el último amor.
Es una novela maravillosa, tierna (no sensiblera) y magnífica que merece la pena leer, mínimo, una vez en la vida, pero que a mi me gusta releer de vez en cuando.
Y vosotros, ¿soléis releer libros? ¿Cuál es el último que habéis releído?
Me tiene que gustar muchisimo un libro para releerlo.De los libros que has mencionado algunos los he leido otros no, me parecen libros muy interesantes ,vamos a ver si los puedo leer ahora que dispongo de màs tiempo. Besos
De esta lista no he leído ninguno, pero me llama mucho la atención “El sueño de Joana”, sobre todo que se desarrolle en Australia.
Ya me contarás.
Saludos.
Lola, no sé si lo tendrán en la biblio, si se te pone a mano, dale una oportunidad.
Besos.