Ensalada de sardinas con cebolla crujiente

La receta de ensalada de sardinas con cebolla crujiente que traigo hoy es muy rica y fácil. Es ideal para esos días en que no has podido cocinar y empiezas a abrir la nevera y la despensa y acabas haciendo una ensalada muy rica y llena de sabor con lo que tenías a mano.

Las sardinas de lata nunca faltan en mi despensa. Sé que es un ingrediente modesto, pero están muy ricas y lo mismo te sirven para preparar unos montaditos de sardinas estupendos que para una ensalada deliciosa.

Además, las sardinas de lata contienen una gran cantidad de ácidos grasos esenciales y calcio. Es comida rápida y en conserva en el polo opuesto de la comida rápida basura.

Verás que no he incluido la sal entre los ingredientes. Para mi gusto con la que lleva la cebolla frita crujiente, las sardinas y los encurtidos es más que suficiente. Pero si tú necesitas un toque extra de sal, ya sabes añádeselo.

Con estas cantidades tienes para una ensalada de sardinas y cebolla crujiente como las de las fotografías, para dos como plato único si sirves algo de postre y acompañas la ensalada con pan.

Ensalda de sardinas y cebolla crujiente

Ingredientes:

150gm de col blanca

una lata de sardinas en aceite de oliva

5 pepinillos en vinagre

3 guindillas vascas o piparrak en conserva

2 cucharaditas de aceite de oliva virgen extra

1 cucharadita de vinagre de Jerez reserva

1 cucharada de cebolla frita crujiente

Preparación:

Pica la col en juliana, lávala y escúrrela bien. Ponla en una ensaladera.

Corta los pepinillos en láminas y las guindillas vascas en trozos, eliminando los pedúnculos.

Adereza todo con el vinagre de Jerez reserva y el aceite de oliva virgen extra. Mezcla bien.

Escurre bien las sardinas de su aceite de conservación y repártelas sobre la ensalada. Espolvorea todo con la cebolla frita crujiente y sirve enseguida.