Las ensaladas de legumbres son ideales para disfrutar de estos nutritivos alimentos no solo en verano sino en cualquier época del año. Hoy traigo una receta muy rápida y sencilla, una ensalada de garbanzos, tomate y mejillones rica y fácil de preparar. Perfecta para servir como plato único.
Las conservas de calidad acortan mucho el trabajo en la cocina y vienen muy bien en momentos determinados. En este caso he utilizado básicamente dos como ingredientes principales: garbanzos cocidos y mejillones al natural. Los garbanzos te evitan tener que ponerlos a remojo y cocinarlos, acortando el tiempo dedicado a la preparación de la receta muchísimo. Los mejillones te evitan tener que disponer de tiempo para su compra, limpieza y cocinado. Y ambos, permiten improvisar el día que quieres hacer esta ensalada, imposible de otro modo.
Los mejillones son muy ricos en proteínas y en hierro y bajos en calorías, el complemento perfecto para los nutritivos garbanzos, más calóricos. El tomate fresco y los encurtidos para dar chispa y personalidad a la ensalada junto con el aliño sencillo son todo lo que necesitas para preparar la ensalada de garbanzos, tomate y mejillones tal y como la ves en las fotografías.
Si quieres ver otras recetas de ensaladas con mejillones en el blog hay una gran variedad ya publicadas.
Si van a comer esta ensalada niños, prescinde de las piparrak en su plato pero anímate a ponerlo en el de los mayores. Da una chispa picante y de sabor muy agradable.
Ensalada de garbanzos, tomate y mejillones.
Ingredientes:
- un bote (420gm) de garbanzos cocidos
- una lata de mejillones al natural
- un tomate grande de ensalada
- una piparra o guindilla vasca encurtida grande o dos pequeñas
- 6 aceitunas negras deshuesadas
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharaditas de vinagre de Jerez reserva
- un pellizco de sal
- una cucharadita de salsa Worcestershire
Preparación:
Escurre bien los garbanzos y los mejillones de sus respectivos líquidos de conservación. Pon las legumbres y los moluscos en una ensaladera, mezclados.
Pela el tomate. Córtalo en gajos y reparte estos sobre la ensalada.
Pica en aros la piparra desechando su pedúnculo y añádela a la ensalada. Pica en daditos y añade también las aceitunas negras deshuesadas.
Es el momento de preparar el aliño. En una tacita pon un pellizco de sal, el vinagre de Jerez reserva, la salsa Worcestershire y el aceite de oliva virgen extra. Mezcla muy bien. Y una vez lleves a la mesa la ensalada de garbanzos, tomate y mejillones, alíñala con este aderezo.
Tiene una pinta estupenda.
Este verano me estoy aficionando a las ensaladas de legumbres. Esta de hoy me parece estupenda.
Besos preciosa.
La de comidas que me habrá salvado esta ensalada jajaja No le suelo poner piparras pero me guardo la idea que con el toque de worcester sauce en la vinagreta tiene que sentarle de maravilla.çBesos y feliz semana,
Palmira
Muchas gracias, Paqui.
Feliz día.
Gracias, Lucero. La verdad es que sientan muy bien.
Besos.
Ya me dirás, Palmira. Es muy sutil pero muy rico.
Besos.
Una receta muy rica y sencilla, ideal para cualquier día.
¡Gracias por compartir!