La entrada de hoy no la escribo sola sino en colaboración con mi marido, que es el cafetero de la casa. Hace unos días me enviaron desde Cafés Fortaleza unas muestras de productos (gracias) para probarlos y comentaros qué nos han parecido. La voz autorizada en tema cafés en esta casa es mi marido, porque yo soy más de disfrutar de su aroma y beber descafeinado con leche que otra cosa, así que es él quien los ha probado solos, que es como se deben catar en estos casos, y me cuenta su opinión para que os la transmita. Pero como el café no es sólo para beberlo y yo también quería colaborar, he preparado una receta muy sencillita y muy rica que a todos los que os guste el café os va a encantar.
Parto de la base de que todos conocéis la marca. Como la mayoría ya sabéis, aunque vivo en un pueblo de Palencia soy de Bilbao y allí el café que más se toma, es Fortaleza, porque es muy de allí (si, lo sé, el café no se cultiva en Bilbao, sólo… en las afueras 😉 ). En Bilbao se toma muy buen café en los bares y cafeterías, no es porque yo sea de allí, es algo que muchas veces sorprende a los visitantes que llegan de fuera, es algo a lo que se le da mucha importancia. De hecho hay en Vizcaya un tipo de establecimiento que no he encontrado en otras provincias o ciudades, y que allí llamamos degustación. La Degustación (o “degus”, porque todo lo que es habitual y cotidiano termina teniendo su abreviatura cariñosa) es una especie de cafetería, pequeñita normalmente, donde se va a tomar el café preparado con mimo por la dueña-empleada (también en masculino, pero las menos de las veces), mientras se charla con las amigas, se lee el periódico o se disfruta de un buen bollo (casi casero, muchas veces artesano o semiartesano, no industrial) para mojar en él. También en muchas se puede comprar el café para llevarte a casa. Os lo cuento para poneros en antecedentes de la importancia que se da allí al café, y creo que Fortaleza al ser una empresa de la zona ofrece al mundo en sus productos ese mimo, cariño y esa exigencia por el buen producto que se le pide allí dónde se produce.
Las tres variedades que me han enviado el otro día para probar son: café molido natural, café molido natural con fibra y café molido descafeinado con tila y melisa.
* Café molido natural: Este es el que habitualmente toma mi marido, así que le encanta. Es “el café” por excelencia. Os puedo decir que a mi me huele “a hogar”, y seguro que muchos entendéis perfectamente lo que quiero decir. Tradicional y sabroso. La nota de cata dice “Final largo y persistente. Ideal para tomar en cualquier momento del día“ y doy fé de que mi marido parece haberlo sabido desde siempre, porque lo disfruta lo mismo en el desayuno, que tras una comida o para disfrutar de algo rico y calentito a cualquier hora.
* Café molido natural con fibra: Este producto no le conocíamos en casa. El sabor es similar al anterior, pero en su composición se añade una fibra natural, la inulina, que hace que el café tenga unas 10 veces más fibra de lo habitual. Al parecer, esta fibra sirve para favorecer el tránsito intestinal (sé que ya lo habíais adivinado), ayuda a regular los niveles de colesterol y glucosa y tiene un efecto prebiótico que favorece la flora intestinal. Mi opinión es que este café es para quien deba tomar fibra añadida o cuidarse en alguno de los aspectos anteriormente mencionados y no quiera incluir en su dieta alimentos específicos (galletas, yogures, etc…) porque no le guste su sabor o no les encuentre acomodo. Si suele tomar café y quiere seguir disfrutándolo sería una buena forma de beneficiarse de sus efectos sobre el organismo sin cambiar de hábitos. Pero si realmente no necesita ese aporte de fibra, creo que la mejor opción es el café molido natural “de siempre”.
* Café molido descafeinado con tila y melisa: Este café descafeinado era también un absoluto desconocido para nosotros. Innovador, una gran alternativa para quien quiera disfrutar de un buen café pero al que le ataquen los nervios o a partir de cierta hora del día pueda tomárselo sin miedo a luego no poder dormir.
Y, como os decía al principio, el café no sólo se bebe sino que también es un ingrediente muy agradecido para muchos platos. Yo hoy he preparado un pudín rústico sabrosísimo y muy económico con el café molido fortaleza natural. Os animo a prepararlo porque seguro que lo disfrutaréis.
Ingredientes:
160gm de pan semi duro
8Cd de café molido natural + agua
450ml bebida de soja
4 huevos medianos
1Cd cacao puro en polvo
75ml whisky
4Cd azúcar moreno de caña
Preparación:
Preparar el café en cafetera italiana con el agua para obtener 250ml de café.
Cortar el pan en dados más bien grandes y repartirlo en una fuente de horno que pueda ir a la mesa.
Regar el pan con el café caliente y el whisky y dejar que absorba bien ambos.
Poner en un vaso de batidora los huevos cascados, la bebida de soja, el azúcar y el cacao puro en polvo y mezclar perfectamente: bañar con ello el pan sin que lo cubra totalmente (para que así contraste una capa superior crujiente con el interior cremoso).
Introducir en el horno ya caliente a 200ºC durante unos 30 minutos (o hasta que al pinchar la aguja salga limpia).
Dejar enfriar muy bien antes de servir, sin meter en la nevera para que la capa superior no pierda crujiente.
Un budin más para añadir a los que hace mi madre con tus recetas. ¡¡¡Apuntado!!!
En casa no tomamos casi café. A mí me quita el sueño…, pero me encanta!!! Así que cuando lo hago es arábiga. Pero tomo nota del Fortaleza descafeinado con tila y melisa. A ver si lo encuentro. 🙂
Besotes.
Gracias por esta entrada compartido con el catador de cafés de tu casa!!! En casa bebemos poquísimo café o con leche pero vamos a lo más sencillo. Y aunque conociera el café clásico los 2 otros los desconocía por completo y me parecen super interesantes!
Lo que me falta en la entrada de hoy es como preparar un café rico con una cafetera italiana… te cuento, me regalaron una cuando ns fuimos de italia y unas veces me sale un café buenísimo y otras para tirarlo directamente… Algo falla pero no doy con que es…
Y el pudding maravilloso, tendré que esconder pan para poder prepararlo porqué aun que no seamos de café el aroma de café en casa siempre me ha encantado…
Besos y feliz semana guapa,
palmira
Espero que le guste mucho, Polita, ya me contarás.
Seguro que lo encuentras fácil, ya ves que es una marca que hay en muchos supermercados.
Besos.
¡Me alegro mucho de que te guste! Si, es lo que yo llamo “olor a hogar”, el café recién hecho, el pan horneándose…
Es raro lo que me dices de la cafetera si usas el mismo café y el mismo tipo de agua, si lo comprar sin moler, no se suele moler muy, muy fino porque le cuesta más pasar. Mi padre y mi marido que son super cafeteros son las que suelen usar (también tenemos de cápsulas pero la usamos menos) y no les da problemas, así que no sé decirte. ¿Será cosa de ella misma?
Besos.
Hola Marhya !!!
Por algo dicen que cuando quieres vender un piso , lo tengas recién hecho para cuando llegue el comprador porque ese olor le recordará al hogar y si tenía dudas en la compra , se decidirá….no se si resulta o no , pero lo he oído en mas de una ocasión
😉
Nosotros somos muy cafeteros , sobre todo yo , pero me gusta en grano para molerlo en el momento de prepararlo y no perder ni mijita de aroma.
El puding me ha encantado, maravillosa forma de tomarse el café para quien no sea tan amante de él.
Besinos, feliz semana.
Jajajaja, pues no me extraña nada, Bego.
Anímate, segurísimo que os va a gustar. Ya me contarás.
Besos, guapa.
Marhya ese pudin tiene que estar buenísimo y además veo que es sencillo de hacer; cualquier rato me animo y lo hago. En cuanto al café descafeinado con tila y melisa no lo conocía y me alegro de saber que existe para poder tomarlo, como tu bien dices, en esas horas en las que una no se atreve a tomarse el natural por si te desvelas, pero por otra parte te apetece un montón un cafecito-Besos.
Si, es un producto original, ¿verdad?
Anímate y nos cuentas.
Besos.
Hola Marhya, ya estoy por aquí por fin, creí que no llegaba nunca el momento jajajaja
Menuda receta la de hoy, no le falta de nada, ni siquiera el toque de wisky! tiene que estar realmente fantástico. Ah, he probado hace poco la bebida de soja, la que llaman leche de soja vamos, y me ha encantado así que ya la he introducido en mi dieta. Este pudin es ideal para introducirla, estoy deseando.
Un besooo
Marisa, pues ya me contarás, que aquí desapareció en un visto y no visto.
He usado bebida de soja porque es la que toma mi marido pero yo te confieso que como la leche de vaca, no encuentro otra.
Besos.
Para quienes les gusta el café, tiene muy buena pinta este puding, sis.
No sabía que Fortaleza era de aquí pero es la marca de café que más paso por la caja, por eso sí que conocía la variedad de tila y melisa. No sé si sirve para todas las cafeteras pero Fortaleza también tienen capsulas.
Compatibles con nesspresso (¿se escribe así?) creo que si.
¡Pues están en Bilbao, despistadilla!! 😉
Besos!!
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