Costillas de cerdo guisadas con champiñones

Las costillas de cerdo guisadas con champiñones que te propongo hoy es una receta sabrosa ideal para los días fríos del año. Si en otros momentos disfrutas de unas buenas costillas a la barbacoa, ahora  estamos en una época ideal para disfrutar de guisos y platos cocinados a fuego lento. Aunque puedes acortar este tiempo con una olla rápida, si lo prefieres.

Este guiso se prepara con ingredientes muy sencillos, básicos y fáciles de encontrar en cualquier supermercado. La elaboración tampoco es complicada. No es un plato rápido porque requiere un tiempo, pero no tiene dificultad. Si disfrutas cocinando una mañana de domingo lluviosa, es el plato ideal para ese día. Incluso es buena idea hacer más cantidad y deshuesar luego la carne, que queda muy melosa, para congelar unas porciones que a diario puedes mezclar con pasta recién hervida o con patatas asadas en microondas.

Para un menú de mediodía es perfecto para combinar con un entrante vegetal y caliente, como el pak choi con almendras o  una ensalada caliente de pimientos asados.

Con estas cantidades tienes para servir las costillas de cerdo guisadas con champiñones como plato principal para 4 comensales.

Costillas de cerdo guisadas con champiñones.

Ingredientes:

• 1 y 1/4Kg de costilla de cerdo troceada
• 250gm de champiñones
• 1/2 cebolla blanca mediana
• 3 dientes de ajo grandes
• 2 pimientos choriceros
• una lata de cerveza tipo pilsen
• una guindilla de cayena
• 1 ramita de tomillo seco
• 1 hoja de laurel pequeña
• pimienta negra
• sal
• aceite de oliva virgen extra

Preparación:

Limpia los champiñones y trocéalos.

Pela los ajos y la cebolla. Pica esta última muy fina.

Pon al fuego una cazuela con un chorrito de aceite de oliva y sofríe la cebolla. Cuando comience a coger color añade los ajos pelados y la costilla salpimentada. Rehoga bien todo junto y una vez se dore la carne baña con la cerveza.

Añade a la cazuela el laurel, el tomillo y los pimientos secos troceados sin pedúnculo y sin semillas. Cubre con una tapa perforada y cocina suavemente en un hervor moderado para que se guise bien. De vez en cuando da vuelta a la carne para que se haga por igual por todos los lados.

Según el grosor de las tajadas, en una hora aproximadamente estará lista. Puedes servir las costillas de cerdo guisadas con champiñones con puré de patatas o patatas asadas o fritas como guarnición.