En este verano tan extraño que nos está tocando vivir siempre queda recurrir a lo conocido y apreciado. También en la cocina. Esos sabores de siempre que te recuerdan a otros verano: el tomate, las anchoillas, un buen bonito en conserva. Son algunos de los que he usado para preparar estas ruedas de tomate con bonito, un entrante estupendo que también puedes servir de una en una como aperitivo. O incluso puede ser una cena sin más añadidos que un postre rápido con mucho sabor, como la sinfonía de plátano o un sorbete de frutas.
El único truco que tiene este plato es buscar un buen tomate. De esos que tienen auténtico sabor a tomate. Algo que debería ser obvio, pero que no lo es tanto. Así que no te preocupes si el tomate es más o menos feo, lo importante es que sea sabroso.
El punto picante le va muy bien al conjunto. En este caso son piparrak picaditas, que elevan el tono en cada bocado. Eso sí, es un plato con un punto de sazón importante. Tenlo en cuenta si es un problema para tu salud y no caigas en la tentación de sazonar los tomates porque sería demasiado.
En esta receta las cantidades son para ocho ruedas de tomate con bonito. Para aperitivo uno por persona está bien, para un plato único para la cena o un entrante de mediodía si el principal es ligero, tres por persona es suficiente.
Ruedas de tomate con bonito.
Ingredientes:
3 tomates grandes
un bote de 400 gramos de bonito en aceite de oliva
una lata de anchoillas en aceite de oliva
una lata de aceitunas negras deshuesadas
2 piparrak o guindillas vascas encurtidas
1 cucharada de cebolla frita deshidratada
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
Preparación:
Lava bien los tomates y corta cada uno en 4 ruedas gruesas. Disponlos en una fuente o en platos individuales.
Sobre cada rueda de tomate con un taco generoso de bonito en aceite de oliva. Y, sobre este, un filete de anchoilla o anchoa en conserva.
Quita el pedúnculo a las semillas. Si quieres un punto picante alto córtalas en ruedas no muy finas. si prefieres rebajarles un poco sin rebajar el sabor, ábrela y retira las semillas para cortar luego en daditos la carne. Reparte sobre las ruedas de tomate con bonito. Y alrededor, las aceitunas negras deshuesadas.
Adereza con el aceite de oliva virgen extra en hilos. Y lleva a la mesa. Añade la cebolla frita deshidratada ya en la mesa para que no se ablande y mantenga este punto crujiente tan rico, en contraste con las ruedas de tomate con bonito.
Estos días estoy comprando buenos tomates, de esos de las huertas cercanas, asi que voy a prepararlos con esta receta para cenar.
Besos peciosa.
Que bueno se ve. Tiene que estar muy rico.
Te va a encantar, Lucero.
Feliz día.
Sí que lo está, anímate a probarlo, Paqui.
Feliz día.