Gulas sobre ruedas de tomate

Si ya estás buscando entremeses y picoteo ricos para las próximas celebraciones aunque sea para disfrutar a solas o solo los de casa esta receta de gulas sobre ruedas de tomate te va a gustar. Es sencilla, apañada de precio, fácil de preparar y, sobre todo, muy rica. Además no lleva mucho trabajo ni requiere manchar muchos cacharros, que también es importante.

Estas gulas sobre ruedas de tomate se pueden preparar con el tomate crudo o pasado dos minutos por la plancha. Lo primero es más fácil y más fresco, lo segundo intensifica el sabor del tomate y lo suaviza de textura. ¿Qué opción es mejor? La que mas te guste. En ocasiones apetece más servirlo crudo, requiere menos trabajo y si el resto de picoteo es frío o templado es estupendo. Pero si hace un día frío o no te fías de que los tomates tengan realmente un sabor intenso, es mejor optar por pasarlos por la plancha.

Para una ocasión especial puedes acompañar este plato de gulas con otros entremeses ligeros y sabrosos. Los espárragos rellenos son una buena opción por ricos y fáciles.  Al igual que las cucharitas de bacalao ahumado y naranja.

Con estas cantidades tienes para 12 unidades de gulas sobre ruedas de tomate. Servir una o dos por persona es lo más adecuado como entremés. Dependiendo de si quieres servir más opciones de picoteo en menor cantidad o no haz las cuentas de lo que necesitas.

Gulas sobre ruedas de tomate.

Ingredientes:

3 tomates maduros pero firmes de tamaño mediano o grande
500 gramos de gulas
2 guindillas de cayena
3 dientes de ajo grandes
aceite de oliva virgen extra
sal

Preparación:

Pela los tomates y corta cada uno en 4 ruedas más bien gruesas. Las puntas puedes dejarlas para ensalada, para una salsa o para saltearlas cortadas en daditos con unas gambas y preparar así otro picoteo rápido para ocasiones especiales.

Si vas a preparar la versión fresca disponlos en una fuente. Si no, cocínalos sobre una plancha de cocina bien caliente con unas gotas de aceite de oliva virgen extra, solo un minuto por cada lado, con un toque de sal.

Pica las guindillas, pela los ajos y lamínalos.

Pon al fuego una sartén con los ajos, la guindilla y un chorrito de aceite de oliva. Cuando se doren los ajos, retíralos y añade a la sartén las gulas. Rehoga todo junto unos 3-4 minutos, los justo para que se calienten y cojan el sabor del ajo y la guindilla.

Con ayuda de un tenedor reparte las gulas sobre ruedas de tomate ya en la fuente o en los platos de servicio. Justo antes de hacerlo añade sal a los tomates si son crudos. Este paso no lo hagas antes para que no suelten mucho agua.