Como ya hemos comentado muchas veces por aquí, para ahorrar en la cesta de la compra, hay que conocer los productos que están de plena temporada e introducirlos en nuestros menús diarios. En una entrada anterior (aquí) ya escribí sobre cómo ahorrar en la compra de alimentación del mes de Noviembre, pero ya que empieza este mes de pleno otoño, me he decidido a ampliarlo con más productos y platos de temporada.
* Es tiempo de col lombarda, un precioso vegetal con un aporte extraordinario de vitamina C (perfecto para prevenir los resfriados y gripes propios de estas fechas). Además es un excelente aliado de las dietas de control de peso pues 100gm aportan tan sólo 25Kcal y su índice glicémico es de 15, además de contener una más que interesante cantidad de fibra. Está muy buena cocida (típicas son las preparaciones que incluyen manzana ácido o castañas) pero también es fantástica en ensaladas, cortada en juliana muy fina.
Algunas formas económicas y sabrosas de llevarla a la mesa son la ensalada con vinagreta de hierbas, la ensalada Ennol o la ensalada Isobel.
* De las nueces se dice que nunca deberían faltar en nuestra dieta diaria, unas 5-6 piezas por día. Este fruto seco se recomienda por los comprobados beneficios para la salud cardiovascular y cerebral de sus componentes. Aunque contienen un número elevado de calorías, una pequeñísima cantidad alegra muchos platos.
Entre las recetas con nueces que puedes encontrar en el blog están los panecillos de pasas y nueces, las endibias con salsa cremosa o el pudding con frutos secos.
* La manzana es una de las frutas que están en su mejor momento en otoño, sabrosa, económica y perfecta para preparar platos dulces y salados, aunque por si sola como postre o tentempié ya es fantástica. Afirma un dicho popular que una manzana al día aleja de casa al doctor.
En el blog hay muchas recetas que llevan manzanas en su elaboración. Tres de ellas muy económicas y sabrosas son el pudín rústico de manzana, la pechuga de ave al gusto del harem y la tarta hojaldrada de manzana.